El Gobierno de Johnson admite que el "brexit" puede crear desórdenes y desabastecimientos
El Ejecutivo se ha visto obligado a revelar ese documento, hasta ahora secreto, a raíz de una votación en el Parlamento que ganó la oposición el pasado lunes.
Un “brexit” sin acuerdo podría provocar desórdenes públicos en el Reino Unido, desabastecimiento de medicinas, y un aumento en el precio de los alimentos y el combustible, según un análisis de riesgos que divulgó este miércoles el Gobierno británico presidido por Boris Johnson.
El Ejecutivo se ha visto obligado a revelar ese documento, hasta ahora secreto, a raíz de una votación en el Parlamento que ganó la oposición el pasado lunes.
Las cinco páginas que se han desvelado anticipan qué ocurriría en el “peor escenario posible razonable” si el Reino Unido abandonara la Unión Europea el 31 de octubre sin haber pactado antes las condiciones de salida con Bruselas.
En ese supuesto, el intercambio de mercancías a través del Canal de la Mancha se reduciría hasta un 40 % del flujo actual desde el primer día, y las fricciones comerciales sustanciales en los puertos se podrían mantener “hasta seis meses”.
Esa situación “tendrá un impacto en el suministro de medicinas y productos médicos”, subraya el documento.
La mayoría de las medicinas que llegan al Reino Unido lo hacen a través de los puertos del canal de la Mancha, lo que las convierte en un producto “particularmente vulnerable” a los bloqueos que podría ocasionar un “brexit” duro.
Sobre la alimentación, el Gobierno prevé que decrecería la disponibilidad de algunos productos frescos, así como el de algunos elementos “críticos” para la industria, como ingredientes básicos, químicos y envases.
Estos factores no llevarían a una falta de alimentos para la población, pero “reducirán la disponibilidad y la variedad de productos”. También se incrementarían los precios, lo que “puede impactar a grupos vulnerables”, señala el documento oficial.
En el escenario que baraja Londres, un “brexit” sin acuerdo podría llevar a “protestas y contraprotestas a lo largo de todo el Reino Unido” que absorberían “una importante cantidad de recursos policiales”.
Al abordar las dificultades que se podrían encontrar los ciudadanos en las fronteras tras una ruptura abrupta con la UE, el Gobierno británico advierte de que las personas que viajen hacia o desde el bloque comunitario “pueden estar sujetos a mayores controles migratorios en las aduanas de la Unión”.
El documento dedica una sección a Gibraltar, donde espera interrupciones en el suministro de mercancías -incluidos alimentos- y medicinas, debido “a la imposición de controles aduaneros en la frontera con España”.
Advierte de que se podrían producir retrasos de más de cuatro horas en la frontera “durante al menos varios meses”.
“Retrasos prolongados en la frontera a largo plazo pueden tener probablemente un impacto negativo en la economía de Gibraltar”, advierte el Ejecutivo británico.
El primer ministro del Reino Unido, el conservador Boris Johnson, sostiene que el país abandonará la UE en la fecha prevista por ahora, el 31 de octubre, haya llegado o no a un acuerdo con el bloque comunitario para entonces.
El Parlamento ha aprobado una ley para forzarle a pedir una prórroga de ese plazo si no ha ratificado un pacto el 19 de octubre, pero él sostiene que no tiene intención de solicitar esa extensión.
Las cosas de Boris Johnson
Manejando una grúa durante una visita a las obras de un puerto en Blackpool
Efectivamente, dentro de un caza de las fuerzas aéreas británicas (RAF)
Podría ser una foto más, pero se trata de una visita al centro de control donde se estaba construyendo una central nuclear
Quizás no era la mejor forma de posar durante su visita a la India.
En su visita a la India aprovechó para saludar a una deidad
Si hace falta pinta él las líneas del campo de juego, como en esta visita al césped del Bury FC
A los mandos de un brazo robótico, echando una mano durante una visita a un centro de FP de Burnley
Johnson, haciendo algo extraño con las manos durante una conexión en directo con el presidente ucraniana, Volodímir Zelenski
Johnson disfrutando de los cuadros del Museo de Prado antes de la cena de líderes por la Cumbre de la OTAN en Madrid
Están todos contados, Boris. Y conocemos el catálogo del British Museum
'¿El parecido es razonable?'. Fuera bromas, es un retrato de la reina de Inglaterra.
Y sí, el retrato lo hizo él.
No estamos seguros de si está preguntando si lo tienen en un tamaño más grande, pero este es un momento de su visita a una fábrica militar en Belfast
¡No, por favor! Decidnos que eso está descargado.
Ojalá supiésemos qué le ha dicho este niño de una escuela de Kent a Boris Johnson
Johnson, en la misma visita a la escuela de Kent, pero tras 'pasar de curso'
Una auténtica rareza en su carrera política, en esta imagen está dimitiendo
Johnson en una fotografía tomada el 13 de noviembre de 2020, durante la pandemia, en lo que aseguró que era una "reunión de trabajo"
Johnson, ayudando a un estudiante de fontanería de un centro de Blackpool con las medidas de un tubo
Johnson, en el mismo centro educativo, pero esta vez poniendo su granito de arena para terminar un muro
A punto de embarcar hacia Kiev para visitar al presidente ucraniano, justo después de que saliese publicado el informe del 'partygate'
Vale, en esta no sale Johnson, pero esta es la cara del gato Larry (la mascota de Downing Street) el mismo día en que Boris dimitió
Johnson, a punto de cortar un pepino recogido de una granja de Cornwall por él mismo. Y bajo la atenta mirada de preocupación de su acompañante.
Johnson, visiblemente satisfecho por la producción británica de brécol.
Johnson, durante una visita a una escuela de Kigali (Ruanda) y, al parecer, es el único que no sabe la respuesta a la pregunta.
Las mil caras (y gestos) de Boris Johnson. Un personaje popular y populista que ha dejado no pocas imágenes 'sui géneris'. Y es que jugando a la cuerda con traje, corbata y zapatos la cosa pintaba fea.
Johnson, ¿dejándole paso? al canciller federal alemán Olaf Scholz en un paseo durante la última reunión del G7
Johnson, nada agobiado por la presencia de periodistas antes de aterrizar en Madrid para asistir a la Cumbre de la OTAN 2022
No solo se le ve practicando deportes, también (hace que) trabaja, como en esta imagen.
Un poco de "running" con bermudas de playa. Peligrosa mezcla.
En su etapa de alcalde de Londres se implicó mucho en promocionar deportes como el rugby de cara a los Juegos Olímpicos. Quizá demasiado. Pobre niño...
Pero en un plano más "serio", fue uno de los grandes referentes de la campaña por el "Sí al Brexit". Por supuesto, su campaña fue "a lo Boris Johnson".
En cualquier lugar y con cualquier objeto: a la salida del bus promocional para el "Vote Leave" contra la permanencia de Reino Unido en la Unión Europea.
No sabemos si es fan de Pink Floyd, pero aquí hizo un guiño a su "Another brick in the wall".
Otro momento deportivo; ahora toca cricket.
Y con la vuvuzela, que tan popular se ha hecho en los últimos mundiales de fútbol.
Si tenía que mojarse por un tema, lo hacía. Literalmente.
Otro momento rugbístico en una sesión de "entrenamiento" grupal.
Un gesto de extraña explicación en plena comparecencia.
Su look con ese flequillo despeinado a veces le ha jugado malas pasadas.
Indefinible.
¿Un remake de "Los gemelos golpean dos veces"?
Si es lo que parece, el voleibol paralímpico no se le da muy allá.
Rugby, voleibol, atletismo... y un poco de tenis, como en este partido benéfico en Queen's.
Cuando estaba a un paso de ser el primer ministro británico, parecía haberse vuelto más "formalito". Aunque con Boris nunca se sabe.
Cuando estaba a un paso de ser el primer ministro británico, parecía haberse vuelto más "formalito". Aunque con Boris nunca se sabe.
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Visitó la India y esta foto era absolutamente inevitable
Las mil caras (y gestos) de Boris Johnson. Un personaje popular y populista que ha dejado no pocas imágenes 'sui géneris'. Y es que jugando a la cuerda con traje, corbata y zapatos la cosa pintaba fea.
En su etapa de alcalde de Londres se implicó mucho en promocionar deportes como el rugby de cara a los Juegos Olímpicos. Quizá demasiado. Pobre niño...
Pero en un plano más "serio", fue uno de los grandes referentes de la campaña por el "Sí al Brexit". Por supuesto, su campaña fue "a lo Boris Johnson".
En cualquier lugar y con cualquier objeto: a la salida del bus promocional para el "Vote Leave" contra la permanencia de Reino Unido en la Unión Europea.