Dos vuelos procedentes de Europa aterrizan en EEUU con al menos 12 pasajeros enfermos
Se está haciendo pruebas a 250 personas, llegadas desde París y Munich.
Los pasajeros de dos vuelos de la compañía American Airlines han sido atendidos este jueves por los servicios de emergencia en el Aeropuerto Internacional de Filadelfia, en Estados Unidos, después de que doce personas presentaran síntomas similares a los de la gripe.
Un total de 250 personas están siendo sometidas a pruebas médicas como medida de prevención, y los Centros de Control de Enfermedades y Prevención de Estados Unidos (CDC, según sus siglas en inglés) han sido notificados, según ha informado la portavoz del aeropuerto Diane Gerace.
Los dos aviones habían aterrizado en el aeropuerto durante la tarde de este jueves, uno de ellos procedente de París y otra de Múnich, según ha indicado Gerace, que ha asegurado que ningún otro avión u operación aeroportuaria se ha visto afectada.
Ninguno de los pasajeros ha sido puesto en cuarentena, tal y como ha explicado la portavoz de American Airlines, Leslie Scott. La tripulación de ambos vuelos, por su parte, no se puso en contacto de forma previa con el personal médico de cara al aterrizaje.
Tercer incidente
El incidente se ha producido tan sólo un día después de que 19 pasajeros de un avión de la compañía Emirates que cubría la ruta Dubái-Nueva York fueran trasladados a un hospital de la localidad estadounidense tras enfermar durante el vuelo.
Según ha informado la aerolínea, los pasajeros enfermos, que fueron atendidos por los equipos de emergencia nada más aterrizar en Nueva York, han podido desembarcar "pronto" del avión que, en un primer momento, se encontraba en cuarentena.
Los resultados de los análisis realizados por los sanitarios arrojarán más detalles sobre la supuesta enfermedad contraída por los pasajeros durante el vuelo de 14 horas, pero todo apunta a una gripe. La comisionada de Sanidad de Nueva York, Oxiris Barbot, ha señalado que los principales síntomas presentados son fiebre, vómitos y tos.
Algunos de los pasajeros habían participado en la peregrinación anual a la Meca, el Hajj, en un momento de alta circulación del virus, lo que podría haberlos hecho incubar la gripe. El virus podría haberse transmitido posteriormente entre los pasajeros dado que se trataba de un vuelo de larga duración.
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Tensión en el avión en cuarentena.
