Detenido un cura en Málaga por distribuir pornografía infantil en Internet
El Obispado de Málaga le suspende cautelarmente de "todo ministerio sacerdotal".
El Obispado de Málaga ha suspendido cautelarmente "de todo ministerio sacerdotal" a un sacerdote tras ser detenido por la presunta posesión y difusión de pornografía infantil. El cura, junto con otras tres personas de entre 36 y 48 años y de nacionalidad española, han sido arrestados por la Policía Nacional en el marco de la operación Sandrina, en la que se han practicado seis registros domiciliarios.
El Obispado de Málaga ha informado en un comunicado de que tuvo conocimiento de que este clérigo, que se encontraba en la ciudad circunstancialmente por motivos familiares, ha sido investigado por los citados hechos. Cuando tuvo noticia de ello, el obispo de la diócesis a la que pertenece el religioso, y tras informar al obispo de Málaga, ordenó "inmediatamente la suspensión cautelar del ejercicio de todo ministerio sacerdotal de dicho sacerdote".
"Quedando a salvo los derechos del investigado y su presunción de inocencia, el Obispado de Málaga reitera su compromiso con la justicia para que resplandezca la verdad y el rechazo absoluto ante los hechos referidos a la pornografía infantil o a otros que conculcan la dignidad y derechos de los menores, de los adultos vulnerables o de cualquier otra persona", resalta el comunicado, en el que "pide perdón a las posibles víctimas e invita a todos los fieles a orar por ellas, por sus familias, por la Iglesia, sus ministros y colaboradores, y también por la conversión de quienes cometen tan execrables hechos".
Ordenadores, cámaras de vídeo, teléfonos...
Los investigadores han incautado más de un centenar de soportes de almacenamiento con material pedófilo. Además, han requisado varios ordenadores, una cámara de vídeo y teléfonos móviles y, durante uno de los registros, los agentes han encontrado un programa de intercambio de archivos en la red en funcionamiento, compartiendo archivos con contenido pedófilo.
La Operación Sandrina comenzó meses atrás gracias al trabajo de rastreo en la red por parte de los agentes y a un aviso del organismo de Estados Unidos encargado de recibir y canalizar perfiles que comparten pornografía infantil.