Desmontando mitos sobre la bisexualidad: "No es una fase"
La youtuber Dulceida o al bailarín Rafael Amargo son unos de los pocos referentes del colectivo.
Ni todos los que tienen parejas del mismo sexo son gais o lesbianas, ni todos los que tienen parejas de diferente sexo son heterosexuales. La "bisexualidad es la orientación sexual de quienes sienten atracción sexual, emocional y/o romántica hacia personas de más de un género y/o sexo, no necesariamente al mismo tiempo, de la misma manera ni con la misma intensidad", según la Federación estatal de lesbianas, gays, transexuales y bisexuales (FELGTB).
Los activistas bisexuales reivindican que se dé más visibilidad a esta orientación sexual y que se acabe con los mitos. Además inciden en la existencia de conceptos como la bifobia o el monosexismo. "Todos tenemos la bifobia interiorizada, es imposible no tenerla", asegura Carlos Castaño Rodríguez, activista de FELGTB y COGAM.
"LA BISEXUALIDAD NO ES UNA FASE"
Castaño explica que el término "bisexual" está muy estigmatizado. "A nadie se le pasa por la cabeza que puedas ser bisexual cuando te ven con tu pareja. Eres o hetero u homosexual", explica. Y lo achaca al hecho de que se haya invisibilizado esta orientación desde la época en la que Freud empezó a decir que la bisexualidad era una fase hasta que uno se construye. "Se da a entender que si eres bisexual no estás maduro o aún no te has definido", dice el activista.
En este sentido, Babs, activista bisexual, vicepresidenta de la asociaión UAMentiende y miembro de Colectiva Desorientada, da la razón a su compañero: "Hay negación e invisibilización. Te dicen que es una fase, que estás confundida, o que eres una lesbiana reprimida". Y añade: "Estar confundida o fluir por distintos estadios dentro de la orientación sexual no es algo malo, pero no puede atribuirse a la bisexualidad ni a todo el colectivo, porque además se hace en un intento de estigmatizarla y restarle validez".
LA RAÍZ DEL PROBLEMA: EL MONOSEXISMO
Ambos achacan todo esto al "monosexismo". Llaman así a una "estructura social que todo el mundo tiene interiorizada y que contempla que las personas puedan sentirse atraídas hacia un sólo sexo o género". El monosexismo niega la bisexualidad y, por tanto, la invisibiliza. "Más allá de las monosexualidades, hay otras identidades que tienen atracción hacia más de un género", asegura Babs.
Este monosexismo también está relacionado con el hecho de que, tanto en la historia como en la cultura y en la televisión, haya una gran ausencia de referentes bisexuales. Castaño recuerda a la youtuber Dulceida o al bailarín Rafael Amargo. Ambos dijeron públicamente que son bisexuales. Pero no se le ocurren muchos más. "Es importante decirlo, porque la etiqueta empodera", asegura Castaño. Explica que los mismos bisexuales a veces tienen interiorizada la bifobia: "Te cuestionas a ti mismo, no te ves válido. Y eso es muy duro pensarlo".
HOMOFOBIA Y BIFOBIA
Otro de los obstáculos con los que se encuentran los bisexuales es el hecho de que su discriminación se considere homofobia: "Se cree que esa discriminación hacia los bisexuales es un sucedáneo de la discriminación hacia los homosexuales", explica Babs. "Hay gente que opina que eres mitad homo y mitad hetero, y que eres discriminado por tu parte homosexual. Nosotros huimos de esa definición. Hay que hablar de homofobia cuando son casos concretos. Pero también hay bifobia", asevera.
Para concluir, Castaño hace un llamamiento a utilizar la etiqueta de "bisexual" y a hacerse visibles. "Así, sacaremos a mucha más gente del armario". De momento, se queda con un mensaje positivo: "Cada vez hay más personas que se interesan por aprender, aunque saben que les queda mucho. Eso ya es un paso importante".