Del hermetismo de EEUU al lavado de imagen de China: así se venden los países más contaminantes en la COP25

Tienen algo en común: son los países más contaminantes del mundo. Su paso por la Cumbre del Clima, sin duda, tiene un valor importante, pero su comportamiento de cara al público ya desde el día 1 marca la diferencia entre todos ellos. Algunos ni siquiera tienen un stand oficial del Gobierno. Otros, en cambio, intentar lavar su imagen con numerosas charlas informativas sobre los esfuerzos que desde sus respectivos estados se están realizando para combatir la crisis climática. Hablamos de China, Estados Unidos, Brasil e India, cuatro pesos pesados en el ámbito internacional.

Hay para todos los gustos: desde naciones cuyos líderes se autoproclaman negacionistas y reconocen abiertamente su posición (Brasil o EEUU), hasta los que intentan proyectar compromiso y concienciación sobre el asunto (China o India). Sin embargo, y a pesar de las diferencias que los separan, son los que generan mayores niveles de gases de efecto invernadero y por tanto, ponen en riesgo la salud del planeta y la de todos sus habitantes.

Desde el lunes pasado hasta el 13 de diciembre, representantes de todos ellos tienen su hueco en el encuentro internacional que se da cita en Ifema y muchas miradas clavadas en ellos.

CHINA: LAVADO DE CARA TOTAL

El gigante asiático vive de las exportaciones y por ello el tamaño de su industria ha terminado por convertirse en un peligro universal. Las cinco provincias en las que se concentra dicha industria emiten más dióxido de carbono que cualquier otro país del mundo. En los últimos años, la capital se ha enfrentado a numerosas alertas rojas en materia medioambiental. Se estima que en la actualidad, la contaminación del aire mata a 1,1 millones de personas al año en el país, si bien es verdad, el Gobierno lleva tiempo intentando paliar sus efectos con medidas cada vez más firmes.

En la COP25 su delegación, abierta al público y financiada por el Gobierno chino, cuenta con un stand en el que se imparten distintas ponencias y actividades para dar a conocer la situación sobre calidad del aire y las políticas que se están llevando a cabo. Sin ir más lejos, este miércoles invitaban a los asistentes a escuchar los pasos que se están dando para hacer un transporte más sostenible.

En una vistosa sala de conferencias junto a una habitación de mesas de trabajo ataviadas con miniaturas de la bandera china, uno de los representantes de la delegación explicaba que su país se había puesto las pilas para reducir la emisión de gases.

BRASIL: LA SOCIEDAD HUÉRFANA EN LA COP25

Si por algo se ha hablado del país en el último año ha sido por los dramáticos incendios a los que se ha enfrentado la selva amazónica y por el negacionismo de su presidente, Jair Bolsonaro, ante la emergencia climática.

Reflejo de ello es que en la presente Cumbre no cuentan con una delegación del Gobierno, sino con un stand organizado por la sociedad civil que en los primeros días se ha llenado de representantes indígenas con el fin de visibilizar una situación alarmante. “Estamos aquí para que se nos escuche, para dar voz a una emergencia que el propio presidente del país no quiere ver. Necesitamos respuestas urgentes”, asegura a El HuffPost una de las asistentes.

Brasil se ha enfrentado recientemente a distintas situaciones que han puesto en jaque su biodiversidad: bosques y ríos se han visto afectados por la mayor tasa de incendios registrada durante los últimos años y una inédita marea de petróleo se ha convertido en la última tragedia ambiental de una zona cuya riqueza  natural es incalculable. Miles de personas afectadas y entidades medioambientales han denunciado la situación durante las últimas semanas, destacando que el gobierno de Jair Bolsonaro ha sido incapaz de hacer frente al problema.

EEUU: CUANTO MÁS HERMÉTICO, MEJOR

“No-me-lo-creo”. Cuatro palabras le bastaron al presidente de Estados Unidos, Donald Trump para tumbar un informe de expertos en el que se detallan los devastadores efectos del cambio climático en la economía, la salud y el medio ambiente.

La gran potencia comercial e industrial es, sin duda, uno de los principales responsables de que los niveles de contaminación mundiales estén disparados.  Sin embargo, el magnate estadounidense prefiere apartar la vista del asunto –y de los miles de expertos que alertan sobre la necesidad de tomar medidas urgentes– y dar portazo al Acuerdo de París, suscrito por 195 estados para ratificar el compromiso de mantener el crecimiento de la temperatura global por debajo de 2ºC.

A pesar de contar con una delegación del Gobierno en la COP25, ésta no permanece abierta al público. Se trata de unas austeras oficinas con la puerta cerrada y un cartel en el que pone “habitación de trabajo”. Otro cartel invita a pedir información a través de una dirección de email.

Uno de sus miembros se limita a aportar un discurso del secretario de estado Michael. R Pompeo, en el que aseguraba hace un mes que aunque no formarán parte del Acuerdo de París, el país seguirá trabajando para reducir las emisiones y utilizar fuentes de energía renovables y tecnologías limpias y eficientes.

Visiblemente decepcionado, el representante americano explicaba a El HuffPost que EEUU no ha tenido stands o pabellones abiertos al público en estas cumbres desde que Trump comenzó su mandato.

INDIA: EL ‘STAND’ MÁS VISTOSO

Si India domina la lista de países con mayores tasas contaminantes, su capital, Nueva Delhi, es la ciudad con el aire más tóxico del mundo.

Pese a haber reducido la contaminación en un 25% según datos del Gobierno, algunos expertos subrayan la necesidad de disminuir la polución un 65% para llegar a estándares internacionales. Niveles aún muy lejanos de los que existen en la actualidad. El Ejecutivo indio es consciente y busca atajar esta problemática.

Su presencia en la Cumbre de Madrid se hace notar con un moderno y vistoso stand en el que a través de pantallas táctiles permite conocer cuáles son las medidas que se están llevando a cabo en el país: conservación del ecosistema en el Himalaya, reforestación de algunas zonas, limpieza de los ríos y una adecuada distribución del agua para que llegue al mayor número de zonas posible, así como políticas para reducir las emisiones y mejorar la calidad del aire.

El lugar, que rememora a Mahatma Gandhi en su 150 aniversario, bien podría ser un stand de India o un escaparate navideño. Los asistentes paran en el lateral a hacerse fotos con las frases del conocido activista que adornan la pared. Una de ellas, deberían grabársela a fuego los políticos de su país y, por qué no, todos los jefes de Gobierno que asisten a la cumbre: “El futuro depende de lo que hagas hoy”.