Un enorme tatuaje y otras salidas del tiesto de Carla Vigo, sobrina de la reina Letizia
Todas ellas impensables para sus primas Leonor y Sofía.
Lejos de los focos, los estudiados estilismos y las visitas oficiales que acaparan titulares, la reina Letizia tiene otra parte de su familia que poco tiene que ver con la realeza y la monarquía. Carla Vigo, hija de su fallecida hermana Érika, es el máximo estandarte de esta vertiente.
Mientras que en la familia real los escándalos se centran en las salidas de fiesta de Froilán y Victoria Federica, Vigo goza de otra libertad más aún desde que se fue a vivir a Alemania en octubre de 2020.
Desde que cumplió 18 años, la joven ha estado en el disparadero mediático por una serie de actos y opiniones que serían imposibles de ver si formase parte de la familia real y mucho menos en sus primas, la princesa Leonor y la infanta Sofía.
La última salida del tiesto de la madrileña de 20 años ha sido un llamativo y gran tatuaje de un tigre en su brazo izquierdo. La imagen habla por sí sola:
Sin pelos en la lengua
Esta no ha sido la última llamada de atención que ha hecho Vigo, que ha demostrado en varias ocasiones tener carácter para hacer frente a los haters y a quienes la critican, especialmente por su físico y por sus ambiciones profesionales. La joven quiere dedicarse al mundo de la danza y las artes escénicas para lo que se ha trasladado al país germano, donde se forma y trabaja como au pair.
El pasado mes de octubre respondió a aquellos que la juzgaban por haberse trasladado fuera de España, algo que sería impensable para sus primas. Muestra del hermetismo de la casa real ante las críticas son los continuos portazos de coche a los periodistas de Froilán y Victoria Federica que, lejos de alguna contestación a los paparazzi, no han reaccionado ante las críticas.
“De verdad, no sabéis el daño que podéis hacer con comentarios así. Vivid y dejar vivir que seréis mucho más felices y tened un poco más de humanidad que seguro que a vosotros no os gustaría ni que se metiesen con vuestro físico o con lo que hacéis con vuestra vida”, dijo entonces.
Tampoco se ha cortado al responder cuando alguno de sus más de 14.400 seguidores se ha atrevido a preguntarle por las polémicas de la casa real, especialmente las relacionadas con la salida del rey Juan Carlos. Lejos de hacer caso omiso a la pregunta formulada en sus stories, Vigo contestó dejando ver que hablar de la monarquía no le apasiona especialmente.
“No pensaba subir esto, pero creo que mi respuesta es obvia: paso palabra. Además, por favor, no me preguntéis cosas así porque me ponéis entre la espada y la pared, y no es cómodo”, señaló entonces.
Su presencia en el 8M
Si algo se ha comentado de Vigo es su postura abiertamente feminista, animalista y defensora de los derechos LGTBI. Fue lo que acaparó la mayoría de titulares cuando cumplió la mayoría de edad. Y volvió a la actualidad cuando compartió una imagen como una más manifestándose el 8M de 2019.
La instantánea, subida a hombros de una amiga con una camiseta morada con el símbolo feminista y los labios pintados de morado pancarta en mano recorrió todos los medios de comunicación. Y no es para menos. ¿Alguien se imagina así a Leonor?
La joven lanzó además un potente mensaje con el que reivindicaba los derechos de las mujeres recordando cómo habían trabajado las mujeres de su familia, entre ellas su madre Érika, fallecida en 2007. “Mi abuela luchó, mi madre luchó y aquí estoy ahora luchando yo”, señaló.
Esta no es la primera reivindicación de Vigo, que ha declarado en más de una ocasión querer dar el pregón del Orgullo LGTBI. De hecho, también fue criticada por fotografiarse con uno de los polémicos los buzones pintados con la bandera LGTBI en Madrid.
La vinculación de Vigo con el colectivo se debe a que es bisexual, tal y como contó el pasado 22 de enero a sus seguidores de Instagram. “No soy hetero, soy bi”, dijo en uno de sus cuestionarios.
No tiene miedo a los medios
A diferencia de los miembros de la casa real y su hermetismo, Carla mostró soltura para hablar con la prensa cuando en enero de 2020 concedió su primera entrevista con Viva la vida (Telecinco). Allí confesó no haber sido consciente del enlace de su tía con Felipe VI ya que entonces tenía solo cuatro años.
“No acabo de asumirlo, está tan metido en mí que no me siento como ellos. Creo que soy una persona normal”, dijo en su conexión telefónica. En sus declaraciones también confesó sentirse expuesta al cumplir los 18 años.
“Sentí que ya nada en mí era anónimo y, la verdad, no me siento muy cómoda”, detalló entonces. El periodista le preguntó por si le gustaría haber nacido en una familia donde hubiese podido vivir en el anonimato. “Por las cosas malas sí, pero mi familia es mi familia y la quiero igual”, sentenció. Además, Vigo negó haber cenado en Nochebuena en Zarzuela como afirmaron algunos medios.