Ayuso ataca al Gobierno ante otros líderes europeos... y le sucede lo peor que le podía pasar
"Señora Ayuso, si me permite..."
Isabel Díaz Ayuso, presidenta de la Comunidad de Madrid, ha llegado este jueves a la Cumbre Europea de Regiones y Ciudades con un objetivo claro que ella misma había anticipado: solicitar “amparo” en la Unión Europea y en todas las instituciones donde sea necesario porque “no nos pueden arrebatar la autonomía fiscal de la Comunidad de Madrid amparada incluso por la Constitución mientras le están dando más alas a los nacionalistas en el resto de las comunidades”.
Pero, en el momento de hacerlo, todo ha salido regular. Ayuso estaba participando en un debate con otros líderes regionales de Europa y estaba tratando de atacar las políticas del Gobierno.
“Creo que nada es posible si luego los gobiernos se esconden bajo prácticas moderadas para tomar medidas muy autoritarias. Pasa también con la política de impuestos. Si las regiones no tenemos autonomía fiscal, que es un problema que por ejemplo nosotros tenemos en España, es imposible seguir liderando esto”, ha empezado diciendo.
“En nuestro país se pretende igualar, pero en una gran desigualdad, las economías, y se pretende que subamos a todos los impuestos y restaurar impuestos anacrónicos que ya no existen en el resto de Europa de manera que haya una mayor recaudación que cae sobre los mismos”, se ha quejado antes de señalar que “lo que vamos a conseguir es expulsar empresas de valor añadido, empresas nuevas, fuera de la UE”.
“Por tanto, yo quiero pedir amparo para que las regiones tengamos autonomía fiscal y más libertad para llevar a cabo propuestas que nos han demostrado ser un éxito”, ha reclamado.
Pero nada ha salido como ella había planeado, porque en ese momento la moderadora del debate ha interrumpido y ha quitado la palabra a Ayuso: “Señora Ayuso, si me permite voy a darle la palabra a otros oradores, lo siento, podemos seguir hablando de esto más tarde, pero tengo que equilibrar un poco el turno de palabra. Si me lo permite”.
Ayuso ha tenido que ponerse rápidamente el traductor para entender qué estaba pasando y en apenas unos segundos el turno de palabra ha ido a Christophe Rouillon, alcalde de Coulaines, en Francia, que ha zanjado con rotundidad: “No creo que el dumping fiscal entre regiones sea la mejor de colaborar. Es todo lo contrario”.