Así funcionaba la red de falsas intoxicaciones de británicos en hoteles españoles
La trama podría haber estafado hasta 60 millones de euros convenciendo a clientes para presentar denuncias por enfermedades gástricas que no sufrían.
El juzgado de instrucción número 2 de Palma de Mallorca ha levantado el secreto de sumario de la investigación sobre la red de falsas intoxicaciones alimentarias que podría haber estafado hasta 60 millones de euros a diversos hoteles españoles. El País ha tenido acceso al sumario y ha publicado este jueves un relato pormenorizado del funcionamiento de la trama, siete de cuyos miembros fueron detenidos en septiembre de 2017.
La periodista Lucía Bohórquez relata que la red estaba dirigida por dos hombres desde Reino Unido, donde canalizaban las reclamaciones y las ponían en manos de bufetes de abogados "de poca ética profesional", según figura en un informe de la Guardia Civil que forma parte de la investigación.
Por debajo de estos dos hombres se situaban dos mujeres que, con base en España, se encargaban de contratar a los captadores, o lo que es lo mismo, las personas que se encargaban de embaucar a los clientes de los hoteles para que simulasen enfermedades gástricas.
Tras el fingimiento, se interponía la denuncia, aunque en algunos casos mediaron años entre la supuesta enfermedad y la demanda. La red prometía a los turistas británicos unas posibilidades de éxito del 98% en el procedimiento y una indemnización de hasta 18.000 euros por cliente. Los despachos de abogados se quedaban el 60% de la reclamación y el 40% restante iba a parar al denunciante.
Hasta el momento, señala El País, se han identificado a 800 turistas que presentaron denuncias a través de 77 bufetes distintos.