Arantxa Sánchez Vicario reconoce que ocultó bienes, aunque se confiesa "víctima" de Santacana
La extenista espera rebajar la pena de prisión que solicita la fiscalía por su colaboración con la justicia.
Josep Santacana se “ha aprovechado” de Arantxa Sánchez Vicario, según palabras de la extenista recogidas en el escrito de su defensa y publicadas por El País. La fiscalía pedía cuatro años de cárcel para la campeona de Roland Garros por ocultar parte de sus bienes para evitar el pago de una deuda millonaria. Ella ha admitido ahora que lo hizo, pero se confiesa “víctima” de su exmarido, con el que sigue en proceso de divorcio, al que también acusa de haber acabado con su patrimonio y de haberse enriquecido a su costa.
La deportista de 49 años muestra en ese escrito su arrepentimiento con el que espera que la pena sea menor, concretamente de siete meses de prisión. La defensa de la extenista alega algunos atenuantes, como la confesión de su clienta para reparar el daño cometido y “su colaboración con la justicia”, según fuentes consultadas por el diario.
Por su parte, el empresario ha negado dicho alzamiento y subraya que cuando se casaron la familia de Sánchez Vicario le hizo firmar unos documentos que lo mantuvieron alejado de su patrimonio. La deportista asegura que emprenderá acciones penales contra él.
Sánchez Vicario fue condenada en 2009 por el Tribunal Supremo a pagar 5,2 millones de euros a Hacienda por cometer fraude fiscal durante los años en los que supuestamente vivía en Andorra. La Agencia Tributaria consiguió recuperar la suma con un contraaval suscrito al Banco de Luxemburgo, donde se guardaba su fortuna.
El problema lo tuvo la entidad: cuando intentó recobrar ese dinero, se encontró con que no quedaba nada, y presentó una querella para reclamar 6 millones de euros. La investigación de la fiscalía concluye que “bajo las consignas” de su marido, Santacana, la pareja “ideó un plan” para evitar el pago. Ambos tienen pendiente sentarse en el banquillo por un delito de alzamiento de bienes.
Tras la querella presentada por el Banco de Luxemburgo, la ganadora de cuatro medallas olímpicas explicó públicamente en una rueda de prensa —junto a Santacana, que entonces era su pareja— que sus padres, su hermano y dos gestores eran los responsables de su ruina tras haberse adueñado de la fortuna que ella amontonó en las canchas.
De momento, la que está considerada como la mejor tenista de la historia del tenis español ha devuelto 1,8 millones de euros a través de diferentes vías, como la cesión de sus derechos de imagen ante “la expectativa de una serie biográfica” en alguna cadena de televisión o plataforma de streaming.