Arabia Saudí culpa a Irán de estar detrás de los ataques a las petroleras
Y Donald Trump anuncia haber dado instrucciones para aumentar las sanciones a Irán.
El portavoz de la coalición militar liderada por Arabia Saudí, Turki al-Malki, ha asegurado que los ataques del pasado sábado contra las instalaciones petrolíferas de Aramco fueron efectuados con 18 drones y 7 misiles de crucero iraníes.
En una rueda de prensa, al-Malki ha explicado que la ofensiva contó con un “incuestionable apoyo de Irán” y se produjo desde el norte y no desde el sur como se creía en un principio.
“Los datos recuperados de las computadoras muestran que son iraníes”, ha afirmado, en unas declaraciones recogidas por la BBC. Posteriormente ha remarcado que en cuanto se sepan detalles más concretos comparecerían nuevamente.
Sobre el desarrollo de los movimientos, que causaron el aumento inmediato del 10% en el precio del barril de crudo, ha reconocido que se utilizaron 18 vehículos aéreos no tripulados en las instalaciones petroleras de Abqaiq y se lanzaron siete misiles de crucero en ambos objetivos. Cuatro de ellos golpearon el campo petrolero Khurais y los otros tres se quedaron cortos de Abqaiq.
Los actos contra las plantas de Abqaiq y Khurais de la petrolera estatal Aramco fueron reivindicados por los rebeldes hutíes del Yemen.
Irán, por su parte, ha negado cualquier tipo de implicación en estos ataques y ha advertido de posibles represalias contra cualquier respuesta militar.
La reacción de Estados Unidos ha llegado a través de Donald Trump, que ha anunciado haber dado instrucciones al Tesoro para “aumentar sustancialmente las sanciones de Estados Unidos” contra Irán.
El secretario de Estado estadounidense, Mike Pompeo, ha llegado justo hoy a Arabia Saudí para coordinar una respuesta a los ataques contra infraestructuras petroleras.
Pompeo fue recibido en la ciudad costera de Yeda por el ministro de Exteriores saudí, Ibrahim al Asaf, y está previsto que se reúna con las máximas autoridades del reino para abordar la crisis.