Un estadounidense compra una casa en Italia y dentro encuentra una "gran sorpresa"

Como ya informamos hace algunos días, el gobierno de Italia ha impulsado una iniciativa basada en ofrecer viviendas a muy bajo precio en zonas que se encuentran total o parcialmente despobladas, con el objetivo de revivirlas y poder hacerlo con gente joven, llena de vitalidad y que puedan adaptarse bien a las condiciones del pueblo en cuestión y aporten su granito de arena cultural, económica o socialmente.

En esta ocasión, la historia la ha protagonizado un estadounidense de nombre Schapiro (48 años) natural de Chicago, que al enterarse de esta iniciativa fomentada por el gobierno italiano, decidió poner rumbo a Latronico, un pequeño pueblo al sur de Italia e irse alejando poco a poco de su país de origen, EEUU. Esto, según explican en CNN Travel, se debe a que la deriva política que está tomando el gigante norteamericano no es del agrado de Schapiro, algo que le ha motivado a buscar otras salidas.

Por ello, en el año 2022 adquirió una pequeña vivienda en el pueblo por 22.000 euros. Y pese a ser conocedor de que el piso se encontraba en circunstancias complicadas, ya que requería de una gran inversión e importantes esfuerzos para convertirla en habitable, la realidad superó la idea que tenía en su mente.

Y es que el saxofonista de profesión, se encontró con un domicilio que en ruinas, para el que ha tenido que invertir hasta este momento más de 10.000 euros en reformas e incluso tener que debatir y negociar intensamente con los dueños acerca de los muebles y las condiciones en las que se encontraban.

El apartamento, que se ubica en una segunda planta, cuenta con escalera exterior propia y una entrada independiente. En total cuenta con 75 metros cuadrados, distribuidos en dos dormitorios y un balcón panorámico. Hasta aquí todo iba bien y sobre el papel, pero lo que no se esperaba, según afirmó él mismo fue "el choque cultural por los extraños muebles" que se encontró en el domicilio.

"Una serie de sorpresas que no esperaba, como que no hubiera techo o baldosas"

En sus propias palabras, asegura que creía que los muebles que le enseñaron en las fotos del listado eran los definitivos, algo que no fue así y por lo que asegura que "hubo una falta de comunicación o un malentendido sobre este tema", con los propietarios.

Según Schapiro, los muebles estaban muy desgastado "o no eran realmente utilizables", algo que le obligó a tirar la mayoría de ellos. Asimismo afirma que "no esperaba algunas cosas" que encontró, como "que la cama era tan vieja y decrépita", algo que sí le molestó pero que finalmente quedó resuelto fácilmente.

Pero sin duda, y pese a tener que retocar y colocar nuevas ventanas, baldosas y reparar grietas, lo que no se esperaba bajo ningún concepto era que no hubiese techo. "Eso fue una gran sorpresa. La cocina estaba totalmente expuesta al cielo, tuve que ponerle una bajante. Dentro de la casa había unos trastos que hubo que tirar", afirmó.

En definitiva, el balance es positivo, aunque afirma que "hubo una serie de sorpresas y cosas que no esperaba, como tener que rehacer el baño, agregar un nuevo calentador de agua y solucionar un problema de humedad dentro de una habitación".