Cae el proyecto Siberia II de Putin
Rusia tenía esperanza en este gasoducto, con Mongolia y China, para compensar la pérdida de comercio de los países europeos.
El gigantesco proyecto de construcción de un gasoducto llamado Poder de Siberia II (o Siberia 2) está en problemas. Es una apuesta personal del presidente ruso, Vladimir Putin, no avanza. El proyecto está pendiente desde hace una década y su importancia para el mandatario ha crecido aún más desde la invasión de Ucrania y el abandono progresivo de los clientes europeos. Con esta nueva obra, Moscú espera reemplazar el mercado europeo que perdió con su "operación militar especial"... pero tendrá que esperar.
La ruta prevista del Siberia II discurre desde Rusia hasta China a través de Mongolia, país vecino de ambos. Ahora, sin embargo, Mongolia ha decidido ignorar completamente el oleoducto de su plan de acciones y apuestas, que se extiende hasta 2028, según informa el South China Morning Post, un diario publicado en Hong Kong .
Munkhnaran Bayarlkhagva, ex uncionario del Consejo de Seguridad Nacional de Mongolia, dijo al periódico que el proyecto del oleoducto se enfrenta a una larga pausa. "Moscú ya no cree que pueda conseguir de Pekín el acuerdo que desea. Rusia dejará de lado el proyecto a la espera de tiempos mejores", afirma.
El proyecto del gasoducto ruso es especialmente importante para la empresa estatal de gas Gazprom, que el año pasado sufrió pérdidas récord, masivas. La razón es la guerra de agresión iniciada por Rusia en Ucrania en 2022, porque antes de la contienda Europa era el mercado de gas más importante para la compañía rusa y, al mismo tiempo, para la propia Federación. Las exportaciones de Gazprom a Occidente se han reducido a una fracción de lo que eran antes. El año pasado, también tuvo que recortar su producción en casi un tercio, un récord.
En China, la voluntad de Rusia de construir un gasoducto es bien conocida y Pekín está aprovechando plenamente la oportunidad. Entre otras cosas, ha exigido a Rusia un descuento en los actuales suministros de gas. El objetivo anterior de Rusia y Putin era que la construcción del nuevo gasoducto pudiera comenzar ya este año. Después de la decisión de Mongolia, cada vez más nubes oscuras se ciernen sobre los planes de Putin.
Tanto China como India son ahora los mejores clientes de Rusia en materia energética, tanto en gas como en petróleo, por lo que cualquier movimiento que hagan en sus negocios con Moscú es realmente sensible. De ellos, en parte, depende que las sanciones internacionales por la contienda ucraniana no le hagan tanto daño.
La situación europea
Las instalaciones de almacenamiento de gas de la Unión Europea pueden cubrir hasta un tercio de la demanda del continente en invierno. La capacidad de almacenamiento de gas de la Unión Europea (UE) de cara al invierno está ya al 90%. Es el segundo año consecutivo que el bloque alcanza su objetivo con antelación.
La Comisión Europea anunció el miércoles que el objetivo se alcanzó el pasado 18 de agosto, diez semanas antes de la fecha límite del 1 de noviembre. Esto equivale a algo menos de 92.000 millones de metros cúbicos de gas, una cantidad que puede cubrir casi un tercio de la demanda de gas de los 27 Estados miembros en invierno. "Creo que es una muy buena señal en términos del estado general del mercado, nuestra capacidad para encontrar suministros de energía alternativos y mantenerlos a un buen nivel", declaró el jueves un portavoz de la Comisión.
"Obviamente estamos en contacto, de forma constante, con nuestros Estados miembros para asegurarnos de que están preparados para el invierno, pero no tenemos indicios de que haya nuevas amenazas o riesgos significativos para el próximo invierno", añadió.
