Este es mi cuerpo, no el tuyo
Parece que son las mujeres del otro lado del Atlántico las que han respondido al globo sonda que lanzaba Gallardón sobre la ley del aborto. El pasado 23 de julio se publicaba un vídeo con el sentir de la mujer americana ante los intentos de restringir su acceso a programas de prevención del cáncer, planificación familiar y aborto.
Parece que son las mujeres del otro lado del Atlántico las que han respondido al globo sonda que lanzaba el ministro Gallardón sobre la modificación de la ley del aborto. El pasado 23 de julio se publicaba un vídeo en el que Jason Stefaniak y Siobhan O'Loughlin dan voz al sentir de la mujer americana ante los intentos de restringir su acceso a programas de prevención del cáncer, planificación familiar y aborto.
Y es que la infeliz idea de Juan Cotino -"Debería ser obligatorio que quien quiera abortar vea una ecografía antes"-, se hizo triste realidad en el estado de Virginia. Con los votos republicanos, se aprobaba una ley que obligaba a las mujeres a someterse a una ecografía antes de decidir si interrumpir su embarazo. Para esta prueba no hay ninguna indicación médica, el único propósito es "ayudar a las embarazadas a tomar una decisión más informada". Un eufemismo para referirse a esa manía de tutelar a las mujeres, de tratarlas como menores de edad incapaces de tomar una decisión por sí mismas.
En referencia al tipo de ecografía vaginal, las mujeres del vídeo afirman "yo decido quién o qué entra dentro de mi vagina y cuándo". No quieren que el Estado les obligue a ser penetradas por una sonda de ultrasonido antes de poder ejercer sus derechos. Finalmente la ley fue aprobada especificando que la ecografía sería abdominal.
No sabemos si la idea del señor Cotino se inspira en sus homólogos republicanos, o si los discurrimientos de los conservadores surgen de manera independiente en diferentes partes del mundo. En cualquier caso, no se ha encontrado ninguna evidencia científica que indique que ver una ecografía haga cambiar a una mujer su decisión de abortar. Más que una medida práctica, es una excusa para que los legisladores se laven la conciencia.
Pero lo que sí está claro, es que el mensaje del vídeo es universal. Además tiene la potencia de lo que es obvio, las mujeres tienen derecho a decidir sobre su propio cuerpo. Y este derecho está por encima de las creencias religiosas de su comunidad, de los intereses de sus familias o del proyecto de vida humana que llevan dentro. Este vídeo está dirigido no sólo al Tea Party, sino también a los defensores de la ablación del clítoris, al ministro Gallardón o incluso a algunas feministas. Los caminos para intentar controlar el cuerpo de la mujer son insondables.
Los que somos padres por gestación subrogada hemos vivido muy de cerca el proceso de decisión de una mujer sobre su propio cuerpo. Nuestros hijos han sido gestados por mujeres maravillosas que decidieron libremente ayudarnos a ser padres. Parece que estoy viendo a la mujer que gestó a nuestra hija decir con esa fuerza que ella tiene: "Este es mi cuerpo, y yo decido si quiero gestar a mis hijos o a los tuyos".
Me he tomado la libertad de traducirlo al español: