Mladic, el 'carnicero de los Balcanes', declarado culpable del genocidio de Srebrenica
Ha sido condenado a cadena perpetua por el genocidio de la población bosniaca en Srebrenica, así como por los crímenes de guerra y de lesa humanidad.
El Tribunal Penal Internacional para la Antigua Yugoslavia (TPIY) ha condenado este miércoles al ex comandante serbobosnio Ratko Mladic, conocido popularmente como "el carnicero de Bosnia", a cadena perpetua por el genocidio de la población bosniaca en Srebrenica, así como por los crímenes de guerra y de lesa humanidad cometidos cometido durante el conflicto armado (1992-1995).
De los once cargos que pesaban contra Mladic, ha sido declarado culpable de diez de ellos, incluido el del genocidio de Srebrenica, el más importante. No obstante, se ha librado del cargo de genocidio por buscar el exterminio de la población bosniaca y bosniocroata.
El presidente del TPIY, Alphons Orie, que ha leído el veredicto, ha afirmado que Mladic intentó crear territorios "étnicamente limpios" de bosniacos (musulmanes) y bosniocroatas y le ha responsabilizado "personalmente" de lanzar una "empresa criminal" para aterrorizar a la población civil de Sarajevo durante el largo asedio a la capital bosnia.
Las miles de personas que esperaban el veredicto han estallado en júbilo.
Por su parte, el alto comisionado de la ONU para los Derechos Humanos, Zeid Ra'ad al Hussein, ha calificado de "victoria trascendental" de la Justicia la sentencia. "Mladic es la personificación del diablo y el juicio contra él es el paradigma de lo que representa la Justicia internacional", ha señalado a través de un comunicado Zeid, quien sirvió en la Fuerza de Protección de la ONU en la antigua Yugoslavia entre 1994 y 1996.
La Unión Europea ha expresado respeto "pleno" por la condena: "Respetamos plenamente las decisiones del TPIY y apoyamos su trabajo", ha asegurado el Servicio Europeo de Acción Exterior en un comunicado, en el que deja claro que no comenta 'sentencias individuales' del organismo internacional.
SENTENCIA HISTÓRICA
Más de 20 años después de la guerra que dejó más de 100.000 muertos y 2,2 millones de desplazados, el antiguo jefe militar de los serbios de Bosnia, de 74 años, ha estado presente en la audiencia. Se ha presentado con sonrisa desafiante y, justo cuando iba a ser leído el veredicto, ha tenido que ser evacuado de la sala después de que el antiguo jefe militar estallara en gritos reclamando un aplazamiento.
El presidente del TPYI, el juez Alphons Orie, ha tenido que interrumpir la lectura del fallo, que ha comenzado en torno a las 10.00, para que el acusado pudiera ir al baño. Lo que en principio era un receso de cinco minutos, se ha prolongado durante más de una hora.
El hijo de Mladic, Darko, ha explicado a la agencia Reuters que su padre ha tenido que tomarse la tensión y que la tiene alta. "Estamos muy preocupados (...) Ya ha tenido cuatro infartos", ha explicado.
La defensa, que a lo largo del proceso ha intentado archivar el caso esgrimiendo problemas de salud, ha solicitado un aplazamiento, pero el TPYI lo ha rechazado y ha seguido adelante con la lectura de su veredicto.
CARGOS HISTÓRICOS
El general Mladic, que aún sigue siendo apoyado y elogiado como un héroe de guerra por buena parte de la población serbobosnia, está acusado de dos cargos de genocidio por la masacre de Srebrenica —en la que los militares bajo su mando mataron a más de 8.000 varones bosniacos (musulmanes) en los primeros días de julio de 1995— y por promover la eliminación de los bosniocroatas y los bosniacos durante la guerra de Bosnia y Herzegovina (1992-1995). La Fiscalía pedía para el exjefe del Ejército serbobosnio la cadena perpetua.
Mladic estaba acusado además de cinco cargos de crímenes contra la Humanidad (por persecución, exterminio, asesinato, deportación y por actos inhumanos) y cuatro de crímenes de guerra (por asesinato, terror, ataques ilegales contra civiles y toma de rehenes). El general serbobosnio fue detenido en Serbia en mayo de 2011 tras haber pasado más de una década como fugitivo.
Mladic está procesado por matar a cientos de bosniocroatas y a bosniacos en varios puntos del país durante la guerra y por promover y ordenar la expulsión de miles de mujeres bosniacas y bosniocroatas. Entre otros hechos, está acusado por haber matado a 144 personas en Biljani, a más de 200 detenidos en la localidad de Foca y a otros 140 arrestados en Susica.
También se le considera responsable de la detención de miles de bosniocroatas y musulmanes bosnios en campamentos diseñados para provocar "su destrucción física", según el escrito de acusación de la Fiscalía del TPIY.
"Mladic planeó la destrucción de los musulmanes bosnios en Srebrenica como un grupo religioso y étnico y compartió su plan con otros participantes en la iniciativa criminal colectiva", sostiene el escrito de la Fiscalía, en referencia al genocidio de Srebrenica.
Además de la acusación de genocidio por liderar la masacre que acabó con la vida de más de 8.000 musulmanes en Srebrenica en los primeros días de julio de 1995 —todavía quedan por encontrar y enterrar los retos mortales de cientos de víctimas—, el general Mladic también debe responder ante el TPIY por haber promovido la destrucción de propiedades públicas y privadas y monumentos y lugares sagrados de los bosniacos y los bosniocroatas durante la guerra, incluidas numerosas mezquitas.
EL TERROR DEL ASEDIO DE SARAJEVO
Por último, el "carnicero de Bosnia" está procesado por asesinato y por sembrar el terror con las fuerzas militares bajo su mando mediante el asedio de Sarajevo, un sitio que se prolongó de mayo de 1992 a noviembre de 1995 y que incluyó el bombardeo del mercado de la capital bosnia, en el que murieron 66 civiles que intentaban conseguir alimentos.
El proceso contra el general Mladic tiene una especial carga simbólica para la población bosniaca, que le considera el brazo ejecutor de la masacre de Srebrenica, un genocidio reconocido como tal por la comunidad internacional, por Naciones Unidas y por el TPIY pero que Serbia y la República Srpska (la entidad serbobosnia de Bosnia) siguen negándose a admitir.
El propio alcalde de Srebrenica, el serbobosnio Mladen Grujicic, y el presidente de la República Srpska, Milorad Dodik, mantienen que no hubo un genocidio. Horas antes de que el TPIY apruebe el veredicto contra Mladic, Dodik ha asegurado que el general serbobosnio no debe ser condenado porque solo cumplió su deber "como patriota" y ha advertido de que si hay una sentencia en su contra, "el mito seguirá creciendo".
El veredicto contra el general Mladic llega después de que en marzo de 2016 el TPIY, con sede en La Haya, condenara a 40 años de prisión por genocidio y crímenes contra la Humanidad al exlíder de la República Srpska de Bosnia Radovan Karadzic.