Un español mata a sus dos hijos de 4 y 5 años en Alemania
Juan Sergio Oliva Gómez, de 38 años y natural de Sevilla, permanece detenido desde el pasado sábado en Alemania como presunto autor de la muerte de sus dos hijos. Los niños son Miguel Ángel, de cinco años, y Leonardo, de cuatro, nacidos en Sevilla. Los pequeños fueron golpeados en la cabeza y acuchillados.
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El presunto parricida se encuentra hospitalizado bajo custodia de la Policía, en el área de salud mental de un centro sanitario germano. También intentó autolesionarse después de cometer presuntamente los dos crímenes, informa Diario de Sevilla.
La madre de los niños y ex mujer del presunto parricida, Yulia Lantukh, de 34 años de edad y nacionalidad rusa, está también ingresada en el mismo centro hospitalario, pero en otro área. La mujer está en tratamiento psiquiátrico después de que descubriera uno de los cuerpos sin vida de sus hijos. Lantukh llegó a Sevilla en 2004 y allí residió durante diez años hasta que se fue a Alemania siguiendo los pasos de su entonces pareja.
El doble crimen se cometió el pasado sábado, en la localidad de Aurich, en Vaihingen an der Enz, una ciudad ubicada a unos 25 kilómetros de Stuttgart, en la Baja Sajonia, continúa el citado periódico.
Ese fin de semana, el del 18 de febrero, los niños se encontraban con su padre según lo acordado tras haberse separado la pareja hacía unos meses. Miguel Ángel y Leonardo sufrieron golpes en la cabeza con un objeto romo y también heridas con arma blanca, según los datos de la autopsia.
En la tarde del sábado, la madre halló el cadáver de uno de los niños, inquieta porque temía que Sergio llevara a cabo sus amenazas, durante los trámites de separación, de hacer lo mismo que José Bretón, quién mató a sus hijos en Córdoba tras separarse de su mujer.
Sus gritos en solicitud de ayuda y socorro alertaron a los vecinos que llamaron a la Policía.
PERMISO DEL JUEZ
A pesar de la amenaza del padre, un juez dictaminó que los menores tenían que pasar un tiempo con el padre de manera periódica. El pasado viernes, la exmujer del detenido fue a recoger a los niños a la guardería y allí le comunicaron que ya se los había llevado el padre, cuando lo habitual era que fuera ella quien los recogiera y los llevara hasta la casa de Sergio.
Tras ello, la mujer llamó a su exmarido y este le dijo que los niños ya estaban en casa y se encontraban descansando, que fuera a recogerlos el domingo por la noche, como de costumbre. No obstante, se dirigió a la vivienda del detenido en la tarde del sábado y descubrió lo sucedido.
Por su parte, el sospechoso habría declarado a la Policía alemana que varios delincuentes llegaron a su casa, mataron a los niños y le agredieron después a él. Se cree que el presunto parricida se autoinfligió las heridas y que planeaba deshacerse del cuerpo de los niños, pero al presentarse la madre un día antes en la casa no pudo completar sus planes.
