Un marroquí y una española, detenidos en Vitoria y Alicante por colaborar con el Estado Islámico
La Policía Nacional ha detenido este miércoles en Vitoria a un marroquí retornado a España de la zona de conflicto en Siria que captaba y adoctrinaba a jóvenes. Una mujer española residente en Alicante también ha sido arrestada por colaborar con el Estado Islámico (EI).
Según un comunicado del Ministerio del Interior, se trata de operaciones desarrolladas por la Comisaría General de Información de la Policía Nacional en colaboración con las brigadas de Bilbao, San Sebastián, Vitoria y Alicante.
El detenido en Vitoria, de 41 años, es un retornado instruido militarmente por Al Nusra, filial de Al Qaeda, y se dedicaba a la captación de jóvenes en la comarca guipuzcoana de Tolosaldea.
La arrestada en Alicante, de 36 años, mantenía contacto virtual con un conocido reclutador de la organización terrorista ubicado en Siria. Su intención era desplazarse hasta allí con sus cuatro hijos menores de edad para reunirse con su marido, que viajó en 2014 para luchar por el Estado Islámico, grupo en el que pudo ostentar un alto cargo.
Los investigadores han constatado que realizaba labores de propaganda a través de las redes sociales, donde empleaba consignas muy agresivas y publicaba emblemas yihadistas y vídeos editados por ella misma, de carácter extremadamente violento y de una ideología islamista radical en favor de la causa Palestina.
Para ello, llegó a denunciar la desaparición ficticia de su esposo y padre de los menores, aunque sabía que estaba combatiendo en zona de conflicto, para poder obtener la patria potestad absoluta de sus hijos y así viajar eludiendo las trabas legales que había encontrado hasta ese momento.
BUSCÓ NUEVO MARIDO POR INTERNET
Ante la imposibilidad de viajar en avión desde España, emprendió con sus hijos trayecto por carretera vía Francia, desistiendo finalmente al conocer la noticia del fallecimiento de su marido.
A su regreso se instaló de nuevo en Alicante, donde inició una labor muy intensa en redes sociales con el objetivo de buscar marido a través de Internet, cumpliendo con lo establecido por el EI para las viudas de los mártires de la organización terrorista; y por otro lado, ensalzando de manera pública la figura de su esposo como combatiente yihadista.
La detenida manifiesta un profundo odio por la cultura occidental y lo ha transmitido de manera directa a sus hijos, por lo que el discurso radical y violento de uno de ellos llamaba poderosamente la atención, por ser impropio de un menor de corta edad.
DE AL NUSRA AL ESTADO ISLÁMICO
Por su parte, el detenido en Vitoria fue instruido militarmente por Al Nusra, filial en Siria y Líbano de Al Qaeda, pero abandonó esta organización por disentir con algunos de sus postulados y se vinculó al Estado Islámico.
En los últimos dos años había centrado su actividad en la captación de jóvenes, preferiblemente de origen marroquí. Se centraba en los más "permeables" a sus postulados y entablaba con ellos una relación estrecha, personal y casi diaria, eludiendo expresamente el uso de redes sociales para evitar ser detectado.
La influencia que el detenido ejercía sobre sus adeptos propició que abandonasen sus familias y entornos para viajar a Siria y llevar a cabo la "yihad violenta".
En septiembre de 2013, tras un profundo proceso de alienación, un marroquí viajó a Siria con el detenido para integrarse en Al Nusra, donde ambos recibieron adiestramiento para el uso de armas de fuego.
El reclutado falleció en zona de conflicto dos años después. Su familia manifestó que, antes de iniciar la relación con el detenido, era un joven sin formación religiosa, nada radicalizado, confiado e influenciable.
Con estas dos detenciones, ascienden a 190 los presuntos yihadistas detenidos desde 2015, año en que el Ministerio del Interior elevó a 4 -sobre un total de 5- el Nivel de Alerta Antiterrorista (NAA).
