Miles de estudiantes en situación límite por el retraso en el cobro de su beca
El curso académico pasa ahora por su ecuador, pero miles de estudiantes que tienen concedida su beca general no han recibido todavía el ingreso del dinero. Eso, aseguran los afectados, está llevando a muchos alumnos a situaciones límite porque en muchos casos no tienen recursos para adelantar el dinero y cubrir gastos como el alquiler. Algunos todavía ni saben si realmente podrán disfrutar de las ayudas.
Ana García, portavoz del Sindicato de Estudiantes, admite a El Huffington Post que no hay datos oficiales del Ministerio de Educación que indiquen cuántos estudiantes están afectados. Pero da por hecho que se cuentan por miles. Recuerda que este tipo de situaciones se vienen produciendo todos los años desde 2013, cuando el entonces ministro José Ignacio Wert cambió todo el sistema de becas e implantó unas ayudas que se dividen en una parte fija, que se cobra antes, y otra variable. Desde entonces, los alumnos reciben sus becas más tarde y de forma fragmentada.
“En la última etapa de Wert se llegó a la situación de que terminaba el curso y había estudiantes que no habían recibido ni un euro de la beca que el ministerio les había concedido”, recuerda a la vez que lamenta que ahora se haya “vuelto a las andadas”. Cree que el retraso en el abono de las becas, que tradicionalmente se hacía en diciembre, refleja que al Gobierno del PP “le da igual la gente que necesita esos recursos para poder estudiar”.
SITUACIONES LÍMITE
García explica que el retraso en el cobro provoca auténticos quebraderos de cabeza para muchas familias que dependen de esas ayudas para que sus hijos puedan estudiar. Eso, insiste, deja a los alumnos en “situaciones límite” que en algunos casos provocan que los jóvenes tengan que volverse a casa porque no les pueden mantener.
“Para poder obtener una beca tienes que tener un nivel de ingresos bastante bajo y muchas veces ni la ayuda es suficiente para hacer frente a los costes. Por ejemplo, un estudiante que es de Extremadura y se va a estudiar a Madrid tiene que pagar un piso, alquiler, transporte, comida… Si, encima, te retrasan esa ayuda, la situación en la que se colocan los estudiantes es completamente límite”, reitera la portavoz del Sindicato de Estudiantes.
Diego Gago Arribas conoce bien las situaciones que están viviendo muchos estudiantes por el retraso en el abono de las becas. Ha abierto una iniciativa en Change.org que acumula más de 3.100 apoyos gracias a la que ha conocido testimonios de afectados. El que más le ha impactado es el de Virginia Martínez, que asegura que lleva una semana “comiendo lechuga y bebiendo té” porque es lo “único” que tiene en el frigorífico. “Tengo que pedir a gente que me lleve a la universidad porque no tengo dinero para pagar nada porque todo lo que tengo es para alquiler y facturas para que no me echen del piso”, denuncia.
El caso de Daniel es urgente, pero no tanto. Es de Ávila, estudió Historia de Arte en Salamanca y ahora cursa un máster en Sevilla. Durante los años de carrera dice que recibía el ingreso de su beca “como muy tarde el 20 de diciembre”. Pero ahora, casi a mediados de febrero, no ha percibido ni uno de los cerca de 2.200 euros de la beca que le corresponde. “Tengo la resolución diciendo que me la han concedido, pero el dinero nada. Y siguen llegando recibos de alquiler, facturas…”, alerta.
"TIRANDO MES A MES"
Tiene que vivir fuera de casa únicamente con los ingresos de su madre, que es mileurista. Subraya que su madre y él están intentando ir “tirando mes a mes”, pero que si el ingreso no le llega pronto no tiene claro qué van hacer. “Intentaremos por todos los medios no dejarlo y menos a estas alturas, pero la situación es muy complicada”, advierte mientras lamenta que el Ministerio no le dé información.
Mientras, advierte, conoce casos de alumnos que “están vendiendo todo lo que pueden por Wallapop” para hacer frente a los gastos. Otros, asegura, van a tener que dejar de estudiar porque no pueden seguir pagando las matrículas y los gastos. Fuentes del Tesoro consultadas por El Huffington Post aseguran que la parte fija de las becas se ingresará “a partir de la semana que viene”. Al pedir algo más de concreción, prometen que “la semana que viene se harán todas”. Para la parte variable habrá que esperar todavía más, así que los alumnos temen no recibirla hasta mayo o junio, cuando acaba el curso.
Eso, sin embargo, no se aplica en comunidades como Cataluña, que tiene una unidad de becas independiente. El Ministerio de Educación sostiene que el retraso de la tramitación de las ayudas para los alumnos catalanes se debe a que la Generalitat aún no ha firmado el convenio que el departamento que dirige Íñigo Méndez de Vigo le envió el pasado 3 de noviembre.
La situación aquí acumula todavía más retraso y hay alumnos que se han enterado esta misma semana de que les concedían la beca. Es el caso de Rebeca, de 22 años, que tras graduarse en periodismo en Valencia ha ido a Barcelona a estudiar un máster en marketing cultural. “Para mí era una situación bastante insostenible, angustiosa, tener que esperar algo que no llega y que no sabes exactamente cuándo va a llegar”, asegura. Ahora entra en otra fase: esperar a cobrar la ayuda.
"NOS ESTÁ DEJANDO EN NÚMEROS ROJOS"
Cuenta que su familia es obrera y que hasta ahora ha podido sobrevivir en Barcelona porque había ahorrado trabajando como becaria y gracias al esfuerzo de sus padres. “Cuando me senté con mis padres y planteamos la situación, sabía que necesitaba el dinero de la beca. Estirar la situación al máximo nos está dejando a todos en números rojos”, alerta.
Rebeca pide que cambie el sistema de becas porque “no puede ser que pidas una ayuda en octubre y tengas que rezar para que te llegue en diciembre e ir sobreviviendo como puedes si se retrasa dos meses”. “Tiene mucho más sentido que se abra el plazo en verano, que la gente empiece a echar la solicitud y se vaya gestionando mucho antes porque la burocracia es terrible. La realidad de esa burocracia es que perjudican a un montón de estudiantes”, se queja.
PIDEN QUE CAMBIE EN CALENDARIO DE BECAS
Una opinión que también comparte Ivana Doblas, que está estudiando un grado superior de Administración y Finanzas en Andalucía. Destaca que no tiene sentido que el Ministerio abone la beca a mediados o finales del curso. "Me van a dar la beca cuando ya he terminado. ¿Para qué? ¿Qué hago con ese dinero? ¿Gastármelo en otra cosa que no tiene que ver con los estudios porque ya los he terminado?"
En su caso, sus padres no trabajan ni tienen paro y su hermana también está estudiando. Asegura que no pueden costearse ni el material necesario: "Yo por ejemplo necesito un libro para un examen de contabilidad y no me lo he podido comprar porque no hay dinero. Mi hermana también necesita materiales y no puede comprarlos. Vamos tirando con lo que nos presta la gente". El reloj de las becas sigue corriendo.