Un perro y su dueña, hospitalizados tras el ataque de una gata a siete pitbulls
Era una mañana más para Kyla Grover y sus siete pitbulls. Daban su paseo matutino por las calles de Victoria, British Columbia, en Canadá, la dueña pensando en sus cosas y los perros a lo suyo, tranquilos. No eran conscientes de los minutos de terror que sufrirían momentos después y, mucho menos, del por qué.
Los animales iban caminando tranquilamente, haciendo cosas de perros, cuando una gata llamada Baby se les acercó y comenzó a atacarlos. Pese a ser una de las razas más violentas, los pitbulls nunca habían sido atacados, así que no supieron como defenderse, según ha explicado su dueña, Kyla Grover, al diario Vancouver Sun. “El gato les daba zarpazos, y a uno de ellos le enganchó la cara”, señala. “A mí me mordió y me arañó cuando estaba intentando separarlos”.
El ataque finalizó con Grover en urgencias, debido a los mordiscos del felino. Uno de los pitbulls también tuvo que recibir atención médica debido a los duros arañazos que había recibido en la cara. "El veterinario pensó que había sido un mapache", señala Gover. Ahora su pitbull está con antibióticos.
Del Thompson, el dueño de la gata, ha señalado que su animal, Baby, a quien adoptó hace 16 años, se asustó al ver la imagen de todos los perros. "Los perros y los gatos no se llevan muy bien a veces", ha apuntado. Él y su mujer pagarán la factura del veterinario.
Eso sí, su mujer señaló que ella avisó al ver a los perros de que su gata estaba allí, según el diario The Sun. ¡Menos mal...!