El mensaje en los bailes locos de David Katoatau: concienciar contra el cambio climático

El mensaje en los bailes locos de David Katoatau: concienciar contra el cambio climático

El levantador de peso David Katoatau, de la República de Kiribati, fue una de las grandes atracciones de la ceremonia de apertura de los Juegos Olímpicos.

Era el abanderado de su país y lo dio todo: se marcó un baile con su bandera de los que marcan época.

Pero Katoatau no se quedó ahí. Durante sus actuaciones en las Olimpiadas ha seguido protagonizando unos bailes que han dibujado las sonrisas en las caras de todos los presentes. Ganase o perdiese, levantase el peso o no, el atleta se reía, miraba al público y empezaba a moverse al compás de una música inexistente.

Pero Katoatau no hace esos bailes porque sí, ni sólo para demostrar su deportividad. Según ha explicado él mismo a la agencia Reuters, sus movimientos tienen una explicación: quiere concienciar al mundo del peligro que supone el cambio climático para su país.

"NO TENEMOS RECURSOS PARA SALVARNOS"

“La mayoría de la gente no sabe donde está Kiribati. Quiero que todos sepan más sobre nosotros, por eso uso las pesas y mis bailes para mostrarnos al mundo”, ha apuntado. Su pequeño archipiélago está amenazado por el cambio climático y sufre la erosión costera no solo en las playas, sino también en otras zonas. “No tenemos los recursos para salvarnos a nosotros mismos”, advierte.

De hecho, el archipiélago podría tener que ser evacuado -tiene 103.000 habitantes- en el futuro debido al hundimiento progresivo que sufre, a la erosión costera y a la densidad de población. Katoatau pide así que el resto del mundo conozca la situación e intente ayudar a su país.

Como recuerda RT, la mayor parte del archipiélago se eleva tan solo dos o tres metros sobre el nivel del mar, y el agua alrededor está subiendo 1,2 centímetros por año —unas cuatro veces más rápido que el promedio mundial— debido al flujo de las corrientes oceánicas. Algunos expertos opinan que para el año 2100 el país habrá desaparecido bajo las aguas.

De hecho, y según informa EFE, Kiribati estudia elevar su territorio de manera artificial para lidiar con la subida del nivel del mar. Un equipo de ingenieros de Emiratos Árabes Unidos visitaron en enero Kiribati para buscar “soluciones técnicas y factibles” a los problemas que sufre el país oceánico.

“Tenemos que buscar estrategias de adaptación más allá de la migración (…) se trataría de elevar el terreno, porque una isla artificial no sería capaz de soportar las mareas altas y tormentas”, afirmó el presidente del país, Anote Tong, a Radio New Zealand.

El proyecto, que será estudiado durante este año, cuenta con un presupuesto estimado en 100 millones de dólares (casi 90 millones de euros) y forma parte de las calificadas como “soluciones creativas” que evalúa el Gobierno.

¿TRASLADAR A TODOS A UNA PLATAFORMA FLOTANTE?

Kiribati, que en 2012 negoció la compra de 2.200 hectáreas de terreno en la isla fijiana de Vanua Levu, también estudia otras propuestas incluida la de trasladar a la población encima de una gigantesca plataforma flotante, similar a las que ensamblan las compañías petroleras para extraer crudo del lecho marino.

El caso de Kiribati no es único; otras naciones insulares del océano Pacífico de baja altitud -como las Islas Marshall, Tuvalu o Tokelau- afrontan el mismo problema.

En su conversación con Reuters, el levantador de peso también recordó cómo fueron sus inicios en el deporte cuando era un niño: “No había gimnasios cuando empecé. Me formé en la playa bajo el sol directo. La barra se calentaba tanto al tacto que me obligaba a entrenar a las seis de la mañana”.