Baldoví apunta a la posibilidad de un Gobierno "transversal" o de concentración
El rey ha trasladado al representante de Compromís-Podemos, Joan Baldoví, su preocupación ante la situación de "absoluto bloqueo" político para la investidura, así como por la posibilidad de que pase todo el verano sin que el "reloj" empiece a contar ni haya avances para la posible conformación de un Gobierno.
Baldoví ha comparecido en el Congreso tras reunirse en el Palacio de la Zarzuela con Felipe VI, a quien ha manifestado que si el líder del PP, Mariano Rajoy, decide no presentarse a la investidura, los partidos que como Compromís han anunciado su voto en contra tienen la "obligación moral" de proponer una alternativa, sea la que sea.
En este sentido, se ha referido a un posible Gobierno "transversal" o "de concentración" que, a su juicio, podría extenderse incluso más allá de las fuerzas de izquierda e incluir a Ciudadanos.
"SERÍA HIGIÉNICO"
"Cualquier posibilidad de pacto que impidiera que Rajoy estuviera en la Presidencia sería sano e higiénico para este país", ha declarado en la rueda de prensa.
En sus treinta minutos de conversación con el jefe del Estado, el portavoz de Compromís en el Congreso ha visto al rey "con las mismas preocupaciones que pueda tener cualquier ciudadano".
En este sentido, ha dicho que el monarca le ha manifestado explícitamente que "no le gustaría" que hubiera que convocar a los españoles a las urnas por tercera vez.
¿Y RAJOY?
Sin querer aventurar si Mariano Rajoy se mostrará este jueves dispuesto ante el jefe del Estado a acudir a la investidura, sí ha señalado que él personalmente opina que si nadie se decide a dar el paso Felipe VI no ofrecerá presentarse a ningún líder, como hizo en enero pasado con Rajoy, quien declinó la oferta del Monarca.
En cualquier caso, la celebración de un debate de investidura es requisito exigido por la Constitución para que a partir de ese momento comiencen a correr los dos meses de plazo máximo para formar Gobierno antes de repetir las elecciones.
Por ello, Baldoví ha compartido con el Rey la preocupación porque si el presidente en funciones no da un paso adelante el tiempo quede "suspendido", pase el verano y el llamado "reloj" constitucional no avance, algo que se evitó en la anterior legislatura cuando Pedro Sánchez aceptó presentarse a una investidura que resultó frustrada.
