La fiesta por el ascenso del Leganés
Cuando el árbitro pitó el final del Mirandés-Leganes, correspondiente a la última jornada de Segunda División, se desató la alegría y la fiesta tanto en Miranda de Ebro como en la ciudad del suroeste de Madrid. El 0-1, con gol de Pablo Insua, certificaba la segunda plaza y el ascenso directo del club pepinero a Primera. Algo histórico porque el club nunca había llegado tan alto.
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Aquí tienes las fotos de la celebración nunca antes vista en Leganés.
Alegría en Leganés
Algunos jugadores fueron manteados por la afición en el mismo estadio Municipal de Anduva, en el que certificaron que el curso que viene el equipo jugará por primera vez en Primera División.
Los jugadores del Leganés tardaron bastante en retomar los vestuarios y se quedaron en el campo abrazándose y gritando para celebrar sus proeza.
Los futbolistas no hicieron caso a la presencia de la prensa en la zona mixta y siguieron con sus cánticos y muestras de felicidad por haber alcanzado la máxima competición nacional.
Los aficionados de Leganés no tardaron en salir a las calles de la localidad madrileña cuando su equipo certificó su ascenso en Miranda de Ebro. La plaza de España fue el punto elegido por los leganenses para las celebraciones.
Las calles de Leganés se tiñeron de blanco y azul, los colores del equipo recién promocionado.
Aficionados de todas las edades se unieron a la celebración del éxito deportivo del club de fútbol local.
El Club Deportivo Leganés se fundó en 1928, tras pasar por casi todas las categorías del fútbol español, nunca había alcanzado la Primera División. Hasta la fecha, en su mejor temporada terminó 8º en Segunda, en las temporadas 1995-96 y...
Nada más terminar el partido en Miranda de Ebro los aficionados del Leganés que habían viajado con el equipo saltaron al campo para celebrar el ascenso con sus jugadores.
Algunos jugadores fueron manteados por la afición en el mismo estadio Municipal de Anduva, en el que certificaron que el curso que viene el equipo jugará por primera vez en Primera División.
Los jugadores del Leganés tardaron bastante en retomar los vestuarios y se quedaron en el campo abrazándose y gritando para celebrar sus proeza.
Los futbolistas no hicieron caso a la presencia de la prensa en la zona mixta y siguieron con sus cánticos y muestras de felicidad por haber alcanzado la máxima competición nacional.
Los aficionados de Leganés no tardaron en salir a las calles de la localidad madrileña cuando su equipo certificó su ascenso en Miranda de Ebro. La plaza de España fue el punto elegido por los leganenses para las celebraciones.
Las calles de Leganés se tiñeron de blanco y azul, los colores del equipo recién promocionado.
Aficionados de todas las edades se unieron a la celebración del éxito deportivo del club de fútbol local.
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