Bruselas propone grandes multas a los Estados que no acojan a refugiados
La Comisión Europea (CE) ha propuesto este miércoles que los Estados miembros que no quieran participar en el futuro sistema de reparto de demandantes de asilo para situaciones de crisis puedan quedar excluidos temporalmente si pagan 250.000 euros por cada refugiado al país que finalmente les acoja.
"Si un Estado miembro no participa (en el mecanismo correctivo de reparto) deberá apoyar a los que sí lo hacen", ha explicado en rueda de prensa el vicepresidente primero de la CE, Frans Timmermans, quien ha considerado que el pago de esta cantidad es una forma de 'solidaridad' mediante financiación.
Timmermans ha recordado que el coste al que tienen que hacer frente las autoridades de los países que aceptan recibir a demandantes de asilo es 'enorme'.
El vicepresidente primero de la CE, Frans Timmermans, durante la rueda de prensa
La CE había marcado como referencia el pago de 6.000 euros por refugiado al país de acogida en sus medidas anteriores de reubicación.
Fuentes comunitarias han reconocido ahora que esta cifra de 250.000 euros se ha calculado teniendo en cuenta los gastos que supone ese trasladado de solicitantes de asilo, pero también se ha decidido que sea tan elevada para incluir un 'elemento disuasorio' y motivar el que todos los países de la UE participen en el nuevo mecanismo.
El pago por la no participación ya se había ofrecido como posibilidad en el marco del mecanismo temporal anterior para la reubicación de 160.000 personas desde Grecia a Italia, pero es la primera vez que se permite sin tener que demostrar unas circunstancias que impidan participar en el sistema, como por ejemplo un nivel elevado de desempleo en el país.
LAS REFORMAS EN MARCHA
Esta medida forma parte de la reforma del reglamento de Dublín, que rige el sistema europeo de asilo, que ha sido aprobado este miércoles por el colegio de comisarios de la UE.
La CE aboga por mantener el controvertido principio del país de entrada, según la cual el Estado miembro responsable de tramitar la demanda de asilo es aquel por el que el demandante accedió al territorio comunitario, aunque propone complementarlo con el citado mecanismo automático de reparto que se activará cuando ese país de entrada vea sobrepasada su capacidad de acogida.
Ese mecanismo correctivo, que permitirá que los países más presionados, como ahora Grecia e Italia, repartan la carga con sus socios comunitarios, será activado de forma automática cuando se rebase el 150% de su capacidad de acogida, que será calculada en función de la población y del PIB (con un peso del 50% cada uno).
El excedente de refugiados que no pueda asumir el país con problemas se repartirá entre los demás Estados miembros también en función del PIB y de la población, aunque además se tendrá en cuenta el reasentamiento de refugiados desde países terceros que haya realizado cada país.
Timmermanas ha explicado que se ha querido tener en cuenta los esfuerzos de reasentamiento de alguna manera porque es una manera de impulsar la creación de vías legales de llegada a la UE.
La propuesta de este miércoles también está dirigida a hacer el sistema de asilo más efectivo y acortar los tiempos de espera, así como tomar medidas para desincentivar los denominados 'movimientos secundarios', incluidas las multas a los demandantes de asilo que se nieguen a ser registrados y la perdida de ciertos derechos de acogida si se desplazan clandestinamente dentro de la UE.
La CE sugiere también reforzar el papel de la Oficina Europea de Apoyo al Asilo (EASO) para que sea la encargada de gestionar el proceso y establecer las claves de reparto.