La situación va a peor
Las conversaciones para la formación de un gobierno y la actividad parlamentaria siguen enmarañadas, y esto no ayuda a mejorar la percepción que sobre la situación tienen los ciudadanos...
La situación va a peor. Ocho de cada diez españoles así lo piensa, según la última encuesta del CIS, realizada a primeros de marzo, "con un gobierno en funciones y en plenas negociaciones políticas", precisa El País que, a través de los porcentajes, nos muestra que la percepción de que es muy mala ha subido cinco puntos. Y no parece que un mes después la opinión haya cambiado, porque esta mañana se constata en la prensa que "Ciudadanos descoloca a Podemos al decir que quiere estar en el Gobierno", y también al PSOE, porque ambos votaron diferente en la paralización de la LOMCE.
No obstante, las reuniones secretas se multiplican. "Sánchez y Junqueras se vieron en secreto en Barcelona" y hablaron de la investidura, según 8tv. Y Ana Cañil y Pilar Portero, en El Huffington Post, cuentan la reunión secreta, el lunes, entre dirigentes de Podemos y negociadores socialistas, en la que los primeros mostraron su disposición a llegar a un acuerdo.
Menos mal que siempre nos queda el recurso de la sonrisa -ya sea en la tira de Gallego y Rey, que cumplen 35 años en el El Mundo, o de Forges en El País. En su viñeta de hoy, dos operarios acuden al Congreso con un artilugio y le dicen al bedel de la puerta: "Buenas, que para la reunión a tres de mañana traemos un inhibidor de egos". "Tercera planta", le responde el funcionario. "Instálenlo junto al detector de prepotencias y la alarma para 'que me levanto y me voy".
A la preocupación por la ausencia de gobierno, puede añadirse la que transmiten los organismos internacionales por la situación económica...
"Lagarde urge a llevar a cabo reformas para afianzar el crecimiento", resume el Financial Times, lo que Cinco Días no duda en calificar de "jarro de agua fría". En un editorial, insiste en que "Europa debe hacer sus deberes", y advierte que, además de las muestras de debilidad de Alemania, está por verse "el efecto que puede tener una política de bajos tipos de interés pensada para abaratar la financiación, pero que obliga al sector bancario a operar cada vez con menos márgenes y puede afectar negativamente a sus resultados".
De hecho, la banca anuncia un nuevo ajuste. Después del Santander, el BBVA anuncia que le sobran dos tercios de sus 3.800 oficinas, leemos en El País. Es decir, volvería a los niveles de 1980.
Un sector bancario que, además, va a tener que encajar las consecuencias de los papeles de Panamá...
"Los bancos, frente al escrutinio de sus relaciones con las compañías off shore", anuncia Financial Times que, en sus páginas de opinión, incluye un artículo del escritor Nicholas Shaxson, autor del libro Paraísos fiscales y los hombres que robaron el mundo, que Panamá es "sólo una de las cabezas de la hidra de los refugios fiscales". Y señala a Estados Unidos, con su política fiscal, de operar como tal, al tiempo que pide coraje a la OCDE y a la Unión Europea para actuar en consecuencia.
Por cierto, que tras la dimisión del primer ministro de Islandia, la prensa británica, como The Independent, señala las dificultades por las que atraviesa David Cameron en el Reino Unido por el fondo que tenía su padre.
Ahora que la fractura digital se reduce en España entre los jóvenes y los mayores, la realidad virtual acude a alejar nuestras penas...
"La inmersión en la imagen: ¿pronto una realidad, o una quimera que siempre será virtual?". Es la disyuntiva que plantea Libération ante la inminente invasión de los cascos de realidad virtual. A favor, que esta tecnología supone una nueva fractura que promete el futuro ahora. En contra, el lado asocial del aparato.
El profesor de Recursos Humanos de la Universidad de Alcalá Ignacio García de Leániz reflexiona en El Mundo sobre lo que denomina "lotófagos digitales", y la paradoja que supone que la digitalización permita registrar todo el saber acumulado pero, por otro lado, conduzca a la amnesia, puesto que todo lo que se almacena, se olvida.
El tuit de esta mañana nos señala una discriminación insólita, consecuencia de las nuevas costumbres...
"Nadie nos lo había dicho", cantaba Elton John con Olivia Newton-John; y, en efecto, nadie les aclara al cantante y a su marido cuál es el título que le corresponde a David Furnish. Si las esposas de los caballeros reciben el tratamiento de lady, nos aclara The Guardian, la tradición no ha contemplado el título que debe adornar a los maridos en los matrimonios gays, y esto, a juicio de Sir Elton, supone una discriminación.