Dinamarca restablece los controles fronterizos provisionales con Alemania por la crisis de refugiados
Dinamarca ha anunciado este lunes su decisión de restablecer controles fronterizos provisionales con Alemania debido a la situación creada por la oleada de refugiados llegados al norte de Europa.
Así lo ha comunicado el primer ministro danés, Lars Løkke Rasmussen, quien ha justificado la medida por las consecuencias para la seguridad derivadas de la entrada en vigor esta madrugada de controles de identidad fronterizos impuestos por Suecia, que no aceptará en el país a quienes no tengan documentación.
"Hay un riesgo grave de que inmigrantes ilegales se queden en Dinamarca. Tampoco queremos ver a refugiados e inmigrantes caminando por las autopistas", ha declarado el primer ministro, en alusión a los episodios ocurridos en otoño pasado en este país.
Los controles danes ya son efectivos desde este mediodía
Los controles daneses, que ya se han hecho efectivos desde este mediodía, estarán vigentes durante diez días prorrogables y serán de carácter aleatorio, ha resaltado Rasmussen, que ha informado a las autoridades europeas y a los gobiernos de los países vecinos.
"El control fronterizo no implica que vayamos a rechazar a los que piden asilo en Dinamarca. No descarto que implique incluso que más personas pidan asilo aquí", ha manifestado el primer ministro danés, sin excluir que pueda imitar a Suecia en el futuro.
LA MEDIDA DE SUECIA
Suecia, el país de la UE que más refugiados per cápita recibe, había introducido controles similares en noviembre, pero dos meses después los amplió apelando a que su sistema de acogida estaba colapsado.
Dinamarca ha registrado desde finales de septiembre 13.000 solicitudes de asilo, casi tantas como todo el año pasado, aunque lejos de las casi 163.000 de Suecia, que en los últimos meses ha abandonado su antigua generosa política de asilo.
Un policía controla el pasaporte de un pasajero en el aeropuerto de Dinamarca
Los nuevos controles impuestos por Suecia afectan sobre todo al puente del estrecho del Sund, que conecta Copenhague con la ciudad sueca de Malmoe y es la principal arteria de comunicación entre ambos países, usada a diario por decenas de miles de personas.
Las autoridades danesas han tenido que implantar puestos de control en la estación de tren del aeropuerto de Kastrup, la última antes de cruzar a Suecia, para registrar a todos los que viajen a este país, una medida que ya provoca ligeros retrasos en el tráfico.
El Gobierno liberal en minoría danés había insinuado en las últimas semanas que podría restablecer los controles, una reclamación del ultranacionalista Partido Popular Danés, su principal aliado y primera fuerza del bloque de centroderecha.
El líder de esta formación, Kristian Thulesen Dahl, ha calificado este lunes la medida de "paso en la dirección correcta", aunque ha pedido que los controles fueran más extensos.