Israel aprueba penar con hasta 15 años de cárcel el lanzamiento de piedras

Israel aprueba penar con hasta 15 años de cárcel el lanzamiento de piedras

ABED AL HASHLAMOUN/EFE

En su intento por frenar las manifestaciones palestinas, Israel apuesta por medidas como penar con hasta 15 años de cárcel el lanzamiento de piedras y prohibir la importación de material pirotécnico de pequeño tamaño.

La Knesset -el Parlamento israelí- ha aprobado en segunda y tercera lectura convertir en ley la propuesta lanzada por el Ministerio de Justicia que establece una pena mínima de tres años para quienes lancen rocas, que han sido incluidas en la lista de "herramientas dañinas" en el código penal.

La responsable de la medida, la ministra de Justicia, Ayelet Shaked, se hizo conocida por afirmar que las madres de los terroristas palestinos debían morir y sus casas debían ser derruidas. Por eso no sorprende que la nueva norma penalice además a la familia de los menores que lancen piedras. Si un niño es declarado culpable de hacerlo o de cometer algún delito de seguridad, sus padres dejarán de recibir cualquier tipo de prestación del Gobierno hasta que cumpla su condena.

También es habitual en las manifestaciones contra la ocupación israelí que los palestinos lancen al aire pequeños fuegos artificiales. Para impedir que tengan acceso a ellos y puedan usarlos contra las fuerzas de seguridad, según la versión del Gobierno, el ministro de Economía, Arie Deri, firmará su prohibición, informa este martes el diario Yediot Aharonot.

LANZAR PIEDRAS COMO INTENTO DE ASESINATO

"Lanzar una roca es un intento de asesinato y debe tener por lo menos un castigo mínimo", dice el presidente del comité de Constitución, Derecho y Justicia del Parlamento isrealí, Nissan Slomiansky. "Una pena mínima es necesaria para crear un efecto disuasorio", ha añadido.

El responsable del Club de Presos Palestinos, Qadura Fares, ha tachado de "racista" la nueva normativa. En su opinión, "es odiosa y contradice la regla más básica de que el castigo sea acorde con la ofensa cometida".

La nueva legislación fue presentada tras la ola de protestas palestinas registrada el año pasado en Jerusalén Este. El lanzamiento de piedras se ha convertido en una especie de símbolo de resistencia desde la primera Intifada y, desde 2011, han muerto tres israelíes por este tipo de ataques.

Esta reforma será aplicable en Jerusalén Este, pero no en Cisjordania, donde rige en su mayor parte la jurisdicción militar israelí. Según el Parlamento, Israel registra cada año unas 1.000 imputaciones por lanzamientos de piedras.