EEUU afirma haber matado al número dos del E.I. en un ataque aéreo en Irak
La Casa Blanca ha confirmado que el número dos del grupo yihadista Estado Islámico (E.I.), Fadhil Ahmad al Hayali, murió en un ataque aéreo estadounidense el 18 de agosto cerca de la ciudad iraquí de Mosul.
En un comunicado, el portavoz del Consejo de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, Ned Price, detalló que al Hayali era "el segundo al mando del grupo terrorista" y también uno de los coordinadores del movimiento de "grandes cantidades de armas, explosivos, vehículos y personas entre Irak y Siria".
Según la Casa Blanca, el líder yihadista viajaba en un vehículo cerca de Mosul cuando falleció a causa del ataque aéreo junto con otro insurgente identificado como Abu Abdullah.
Miembro del Consejo de la Shura y alto mando cercano al líder del EI, Abu Bakr al Baghdadi, al Hayali apoyó operativos del grupo yihadista tanto en Irak como en Siria, de acuerdo con Price.
Además, este antiguo oficial iraquí y exmiembro de Al Qaeda en Irak fue "fundamental" en la planificación de las operaciones de los yihadistas en los últimos dos años, incluyendo la ofensiva que permitió al EI tomar el control de Mosul en junio de 2014.
UN "IMPACTO NEGATIVO"
La Casa Blanca enfatizó que la muerte de al Hayali "impactará negativamente en las operaciones del EI, dado que su influencia se extendió a las finanzas, medios de comunicación, operativos y logística" del grupo.
"Estados Unidos y sus socios de la coalición están decididos a degradar y destruir a este grupo terrorista que ha causado tanto daño y sufrimiento a la población de la región y de más allá", subrayó el portavoz.
Una coalición internacional liderada por EE.UU. inició a mediados del año pasado la campaña de bombardeos aéreos contra posiciones del EI en Irak y Siria.
DESTROZOS EN EL PATRIMONIO DE HOMS
Además, la directora general de la UNESCO, Irina Bokova, ha condenado enérgicamente la destrucción del monasterio de Mar Elian, ubicado en la provincia siria de Homs, por parte de milicianos del grupo yihadista Estado Islámico.
Era un lugar de peregrinación de la comunidad cristiana siria, que celebraba festividades anuales con la participación de miles de personas en homenaje de San Elián.
"La destrucción sistemática e intencional del patrimonio cultural sirio ya alcanza niveles sin precedentes. La destrucción del Monasterio Mar Elián es una pérdida trágica para la región, y para las mujeres y hombres de todo el planeta", ha denunciado Bokova.