La marca de ropa de tallas grandes Lane Bryant ha vuelto a poner sobre la mesa el debate sobre los cánones de belleza femeninos. En contraposición a las campañas protagonizadas por modelos delgadas como Alessandra Ambrosio de la firma de lencería Victoria's Secret, esta otra empresa ha decidido apostar por mostrar a mujeres con curvas en su último anuncio.
En el spot, de una colección de sujetadores, aparecen varias modelos de tallas grandes como Ashley Graham, Marquita Pring o Candice Huffine —una de las musas del último calendario Pirelli—. Durante el anuncio, definen qué entienden ellas por sexy y repiten la expresión I'm no angel (No soy un ángel), en referencia a los ángeles de Victoria's Secret.
Las propias modelos protagonistas de la campaña han invitado a través de las redes sociales a que las mujeres cuelguen fotos de ellas mismas mirándose al espejo con el hashtag #ImNoAngel.
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La iniciativa se está convirtiendo en viral. Mujeres de todo el mundo están siguiendo su ejemplo y publicando sus selfies y mensajes al respecto en la red.
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Recientemente Victoria's Secret tuvo que afrontar más críticas por el modelo de mujer con el que anuncia sus prendas. En noviembre de 2014 tres estudiantes de Reino Unido consiguieron movilizar a 25.000 personas que firmaron una petición para que Victoria's Secret modificara su campañaThe perfect body (El cuerpo perfecto). En ella, la firma mostraba bajo ese lema a diez modelos muy delgadas. Además, desencadenó cientos de tuits de protesta bajo la etiqueta #IAmPerfect (#YoSoyPerfecta).
Se hizo famosa desfilando para Jean Paul Gaultier en 2007 en París. Ha creado su propia revista VOL•UP•2 y hace campaña para promover cambios en el mundo de la moda.