Protocolo para el Ébola: Osakidetza activa medidas de precaución ante un caso sospechoso

Protocolo para el Ébola: Osakidetza activa medidas de precaución ante un caso sospechoso

WIKIMEDIA

El Gobierno vasco ha activado el protocolo para descartar el contagio de ébola en un caso en el que se dan los requisitos acordados por las Comunidades Autónomas y el Ministerio de Sanidad.

El paciente, que presentaba fiebre, es un varón de mediana edad, vecino de Vizcaya, que ha regresado hace unos días de Sierra Leona, donde se encontraba por motivos laborales no sanitarios.

El hombre ha quedado ingresado en aislamiento, tal y como marca el protocolo, en el hospital Universitario Basurto, uno de los centros hospitalarios de referencia establecidos en Euskadi. Su estado de salud es bueno y permanecerá aislado y con seguimiento hasta conocer el resultado de la analítica practicada. Dado que el estado de salud del paciente es bueno, no se emitirá ningún otro comunicado hasta conocer el resultado de los análisis.

El Departamento de Salud y Osakidetza ha puesto en marcha el protocolo como medida de precaución porque en el caso concurren los requisitos acordados entre el Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad y las Comunidades Autónomas. Los criterios para considerar un caso en investigación incluyen que el paciente presente fiebre elevada -más de 38,3ºC- y al menos dos de los siguientes síntomas: mialgias, cefalea, odinofagia, vómitos, manifestaciones hemorrágicas (exantema o petequias, epistaxis, hemoptisis, hematemesis, melenas o cualquier otra evidencia de sangrado, externo o interno).

Osakidetza han trasladado un mensaje de tranquilidad, ya que "no hay motivos fundados para crear ningún tipo de alarma". En todo momento, se han llevado a cabo las actuaciones que marca el protocolo y que en la Comunidad Autónoma Vasca se encuentra activado desde el pasado mes de abril.

EL ÉBOLA QUE NO FUE EN ALICANTE

Alicante activó el mismo protocolo la semana pasada ante otro caso sospechoso que finalmente fue descartado.

Se trataba de un hombre de origen nigeriano que ingresó en el Hospital Sant Joan de Alicante con síntomas de poder tener ébola: fiebre alta, malestar, vómitos y hemorragias.

El hospital Sant Joan de Alicante remitió las pruebas epidemiológicas al Instituto de Salud Carlos III, el centro encargado de coordinar la investigación sanitaria pública en España.