El religioso con ébola está "estable" y la monja está "en muy buen estado general"
Los religiosos Miguel Pajares y Juliana Bohi ya han ingresado en el Hospital Carlos III de Madrid. Según una primera información sobre su estado, facilitada por responsables de la Comunidad de Madrid, Pajares está "clínicamente en una situación estable". El sacerdote, que tiene el virus del ébola, llegó a primera hora de la mañana a Madrid procedente de Liberia junto a Bohi, que presenta un "muy buen estado general".
El consejero de Sanidad de Madrid, Javier Rodríguez, ha hecho un llamamiento a la calma, recordando que el virus no se contagia como el de la "gripe" sino por "contacto" con "secreciones" como sudor, orina o heces.
"Han llegado bien" y "en buenas condiciones", ha dicho Rodríguez. A Bohi se le realizará un nuevo examen y prueba para determinar si finalmente no tiene el virus, en cuyo caso será dada de alta.
"La posibilidad que existe [de contagio] es muy pequeña", ya que "el paciente viene encapsulado" y el hospital está perfectamente preparado para afrontar el aislamiento de enfermedades que se contagien incluso por vía aérea. Sin embargo, no es el caso. Según ha ejemplificado el consejero, en la misma sala donde atendió a los periodistas podría haber un caso positivo sin que hubiera contagio, ya que es imprescindible el contacto directo con secreciones.