El 'Movimiento de Gamonal' de Burgos continuará tras la suspensión de la obra
Una asamblea de más de 300 vecinos del burgalés de Gamonal, donde en la última semana se han sucedido concentraciones de protesta contra la construcción de un bulevar, han decido este sábado que lo que han llamado "Movimiento de Gamonal" tendrá continuidad pese al anuncio de suspensión definitiva de las obras.
Los vecinos han planteado continuar con las asambleas que han venido celebrando dos veces por jornada durante los últimos días, aunque ha adelantado que serán algo mas espaciadas en el tiempo y en los próximos días estudiarán su periodicidad.
También buscan otro lugar para celebrar estas reuniones dado que, según anunció este viernes el alcalde de Burgos, Javier Lacalle (PP), a partir del lunes comenzarán las obras de reposición de la calle Vitoria a su estado anterior, por lo que la asamblea no podrá celebrarse en este lugar.
La asamblea ha planteado varios problemas del barrio que creen que también requieren una respuesta de las administraciones, entre los que se ha destacado la carencia de viviendas para personas necesitadas y los desahucios que, según ha dicho unos de los participantes, "se están cebando con el barrio".
ESTE SÁBADO, OTRA MANIFESTACIÓN
Además, la Asamblea Vecinal del Gamonal ha acordado seguir con las acciones para exigir la absolución de los detenidos a raíz de los disturbios y denunciar el "abuso policial".
Los vecinos han respaldado también una nueva convocatoria de manifestación, que este sábado recorrerá las calles del barrio por las calles San Bruno, Santiago y Eladio Perlado hasta la iglesia Real y Antigua de Gamonal. En ella, se pedirá la absolución y detenidos en toda España en las concentraciones de los últimos días y pretende ser un agradecimiento a los vecinos por su respaldo a lo largo de la última semana.
Los vecinos han protestado toda este semana porque los planes del Consistorio consistían en convertir la calle Vitoria, una de las principales arterias de Burgos, en un bulevar que limitase el tráfico rodado y priorizase el tránsito peatonal y bicicleta. El problema, según los vecinos, es que se iban a eliminar 300 plazas de aparcamiento, que serían sustituidas por un parking donde cada plaza costaría 19.800 euros. Además, los trabajos costarían entre 8 y 13 millones de euros.
Tras las protestas, el alcalde de Burgos anunció la paralización definitiva de las obras en el barrio. "Vemos la imposibilidad material de ejecutar esta reforma y hemos decidido la paralización definitiva de las obras", ha anunciado.