El debate de La Sexta: La huida en el Congreso y el regreso de Franco (VÍDEOS)
‘La Sexta Noche’ no se fue de puente. Sí lo hicieron los diputados del Congreso. Quedó claro el pasado jueves cuando políticos de todos los partidos abandonaron en estampida el hemiciclo sin esperar a escuchar el resultado de la votación que habían realizado minutos antes.
No querían coger atasco, ¿pero fue acertada su actuación? Los contertulios de La Sexta respondieron a la pregunta en el primer debate de este sábado. Porque ellos no salieron de Madrid y se quedaron a hablar de este asunto, de la propuesta del PSOE de exhumar el cadáver de Franco y de las últimas noticias sobre los duques de Palma.
La estampida 'antiatasco' fue general como también lo fue la opinión de los colaboradores. Dos palabras resumen lo dicho en plató: Mala imagen. Luego ya vendrían los matices sobre sus consecuencias. El abogado Javier Aroca insistió en su poca trascendencia: “ Hay que criticarlo, hay que reírse pero no conviene hacer una causa contra los políticos"; mientras que el periodista Carmelo Encinas pidió reflexión: “Es una anécdota de la que deben aprender los políticos que no tienen que dar la apariencia de que su trabajo no es suficientemente serio".
El director de La Razón, Francisco Marhuenda, se pronunció en la misma línea (“entiendo que quieran coger el puente pero no pueden hacerlo de esta forma") aunque quiso romper una lanza a favor de los políticos: “A mí me parece que cobran poco”.
Borja Sémper, portavoz del PP en la Cámara Vasca y uno de los invitados de la noche, también tuvo que enfrentarse a la pregunta ante la que apostó por la actitud crítica: "Probablemente sea una anécdota pero estamos en un momento en que hay mucha sensibilidad en la ciudadanía. Los políticos tenemos que cuidar estos gestos que cabrean". Su respuesta fue un avance de lo que sería la entrevista posterior en la que buscó contentar al público general pero no perdió la oportunidad de defender a su partido en los grandes temas.
EL FUTURO DEL VALLE DE LOS CAÍDOS
El momento político que indignaba el jueves a los españoles no llevó al calentamiento en plató como sí lo harían después otro de los asuntos candentes de la semana. ¿Deben exhumarse los restos de Franco del Valle de los Caídos como propone el PSOE? La tranquilidad y la templanza desaparecieron, el tono se elevó y el plató se puso on fire.
Aquí la palabra clave fue división. Y fueron los partidarios de la no exhumación quienes conquistaron al público que al final del debate se inclinaron en mayoría (un 66,7%) por el no. "Éste es un asunto que a los españoles ya nos les preocupa", decía Eduardo Inda, director adjunto de El Mundo, como conclusión.
“Es un sitio que no me gusta pero me niego a gastar un solo euro del dinero público en el Valle de los Caídos cuando hay catedrales y colegios que se caen” fue el argumento de la periodista Marta Rivera de la Cruz. Lo cierto es que, según cálculos de 'La Sexta noche', crear un monumento de la Concordia como propone el PSOE costaría 13 millones de euros y levantar el cadáver de Franco para llevarlo a otro punto de la Comunidad de Madrid, sin contar los gastos de seguridad y las obras, serían 3.000 euros. Trasladarlo a otra provincia supondría el doble.
Los partidarios de la política del PSOE defendieron el lema de “la tumba del dictador no puede estar en un espacio público" porque "España es el único país democrático donde se rinde homenaje a la memoria de un dictador", decía la periodista Elisa Beni. Para el socialista Antonio Miguel Carmona el hecho preocupante es que en ese mismo espacio conviven 34.000 republicanos sin nombre.
La postura de Alfonso Rojo fue muy diferente: “El Valle de los Caídos no es modificable. Es un monumento que hizo el que ganó la guerra a su bando, no es cambiable". Y Marhuenda explicó la propuesta en términos propagandísticos: "El PSOE para intentar ganar unas elecciones tiene que sacar a Franco". "Dejemos la historia en paz de una vez por todas", puntualizaba.
IMPUTAR O NO IMPUTAR
Igual de caldeado estuvo el debate sobre la noticia de que 'La infanta Cristina firmó un contrato ficticio de alquiler de su palacete'. Eduardo Inda no dudó cuando tuvo que hablar sobre el asunto destapado el martes por su periódico: ”La infanta perpreta un clarísimo fraude de ley que la avoca a la imputación”.
La abogada Paloma Zorilla no lo ve tan claro: “A mí me parece fatal pero es un fraude administrativo, no es un delito. A la infanta por eso no la van a imputar". Y la periodista Carmen Enríquez trató de justificar los hechos al decir que otros también lo hacen.
LOS IMPUESTOS DE LOS MADRILEÑOS
¿Acierta o no Ignacio González con la decisión de bajar los impuestos en la Comunidad de Madrid? El primero que respondió a esta pregunta fue el economista José María Gay de Liébana quien en cierto modo aplaudió la medida que permitirá ahorrar casi 422 euros al año: "Las bajadas de impuestos pueden estimular más el consumo que provoca actividad económica y ésta a su vez provoca puestos de trabajo”.
En la mesa de debate hubo división. La opinión más pareja fue la de Antonio M. Beaumont ("bajar impuestos es poner en marcha la actividad económica y conseguir más puestos de trabajo") y la nota discordante la puso el periodista Fernando Garea ("Para la crisis económica esta bajada de impuestos no tiene ningún efecto"). Carmelo Encinas fue más allá al verle una doble intención: "A mí me parece que esto es una operación con una carga política importante. El señor González se ha ganado un puntazo diciendo que baja los impuestos porque tiene que ganarse el respeto de la ciudadanía. Además en este momento cabrear a Montoro es un plus".
Josep María Gay de Liébana también analizó las consecuencias de la subida de nota del agencia Fitch que ha pasado de negativa a estable. "En 2014 nos vamos a mantener y al final de año subiremos un poquitín”, dijo en tono de esperanza. Y señaló con preocupación las cifras de economía sumergida en España: “Sin el fraude de la economía sumergida, Hacienda podría recaudar un 25% más".
SÉMPER, EN DEFENSA DEL PRESIDENTE
Con talante y queriendo contentar a todos. Así pareció llegar el portavoz del PP en la cámara Vasca Borja Sémper, autor del libro 'Sin complejos', aunque lo cierto en los temas peliagudos sacó las uñas para defender a su partido. Después de hablar de la famosa estampida en el Congreso confesó que un empresario le ofreció una gratificación por su trabajo: “Es muy importante que la gente que hace política desde el minuto uno pongamos un cortafuegos con la corrupción (…) Hemos permitido que los jetas y los caraduras tengan una presencia en política que no deberían tener".
Sobre este tema penalizó que el PP no lo ocurrido con Bárcenas, aunque también aplaudió a Rajoy: "El presidente del Gobierno no aceptó ni un chantaje ni una presión de Bárcenas. Y eso es lo que me importa". Sólo le echó una cosa en cara: “La transparencia tiene que ser permanente”.
La ley Wert de Educación y la política sanitaria del PP fueron algunos de los temas en los que tuvo que mojarse y ahí salió en defensa del partido. "Creo que el futuro sería peor sin una Sanidad Pública de calidad, por eso la voluntad del gobierno del PP es recuperar y volver a las cotas anteriores y mejorarlas", a lo que el presentador matizó: "Es cierto que se ha comentado que son medidas duras pero no que serán medidas que se vaya a dar marcha atrás".
Zapatero y Aznar también tuvieron presencia en la entrevista. Porque si al primero lo critica por su excesiva presencia, para el segundo tuvo 'buenas' palabras. “José Luis Rordríguez Zapatero ha sido el peor presidente del Gobierno de España pero creo que está demostrando una gran talla como expresidente”. La razón? Porque calla, acata y rema a favor.