El casco para ciclistas en ciudad y el aumento de velocidad en autopistas, aspectos más polémicos del reglamento de tráfico
El Gobierno tiene previsto aumentar temporalmente a 130 kilómetros por hora la velocidad en ciertas autovías y autopistas y establecer el uso obligatorio del casco para ciclistas en la ciudad. Estos son dos de los principales y más polémicos puntos de la reforma del reglamento general de circulación, que ha presentado este martes en el Congreso la directora general de Tráfico, María Seguí.
El casco para los ciclistas ha centrado buena parte del debate en la Cámara Baja. Seguí ha asegurado que la DGT "no tiene ninguna duda respecto del efecto beneficioso", pero ante las críticas que ha despertado esta medida, ha invitado a los grupos parlamentarios a que la debatan en una ponencia específica antes de su inclusión definitiva en el reglamento.
Los grupos han recogido el guante que les ha lanzado en la comisión de Seguridad Vial. Aunque la DGT no ha dado marcha atrás en su propuesta porque considera "incuestionable" que el uso de este elemento de seguridad será beneficioso, esperará el resultado del trabajo de esa subcomisión, que previsiblemente se creará el próximo 11 de junio.
En este sentido, ha indicado que la DGT está "tan convencidos de la utilidad" del casco de los ciclistas en ciudad "como para promoverlo con el mejor de los instrumentos educativos" de los que dispone el Gobierno: "la legislación". Sobre las críticas, aunque ha indicado que entiende que pueden ser "razones legítimas", ha apuntado que el debate "no es nuevo" y se ha repetido cada vez que se ha introducido una elemento de seguridad, como el casco para ciclomotor o el cinturón de seguridad.
Para dar una idea de la "magnitud de las consecuencias negativas" que la DGT está "tratando de evitar" con el uso del casco, Seguí ha señalado que en 2011 murieron 49 ciclistas, 37 en vía interurbanas y 12 en vías urbanas.
Asimismo, ha indicado que se produjeron 304 heridos graves en vías interurbanas y 285 heridos en vías urbanas, así como 1.423 heridos leves en vías interurbanas y 2.788 heridos leves en vías urbanas. En este sentido, ha indicado que "en zona urbana" se produce "una mayor proporción" de heridos.
REFORMA DE LA LEY DE TRÁFICO
Pero antes de que se apruebe el reglamento, Seguí ha anunciado la "inminentísima" presentación al Consejo de Ministros del anteproyecto de reforma de la Ley de Tráfico y Seguridad Vial que, entre otras cosas, prohibirá los detectores de radares, establecerá el test de saliva como único método para constatar los niveles de droga al volante y regulará los sistemas de retención infantil.
Una vez en marcha esa reforma, lo hará el reglamento, que solo tiene que pasar el trámite del Consejo de Ministros y que incorporará modificaciones en los límites de velocidad en carreteras y ciudad o la eliminación de la práctica totalidad de exenciones en el uso del cinturón.
VELOCIDAD
La intención del Gobierno es elevarla hasta los 130 kilómetros por hora solo en determinados tramos de autovías y autopistas que no registren accidentes y en los que se cumplan óptimas condiciones meteorológicas, ambientales y de pavimentación.
También propone una reducción de la velocidad máxima a 90 kilómetros por hora en las carreteras convencionales con arcén de 1,5 metros, establecida actualmente en 100, mientras que en muchas calles del país no se podrá circular a más de 30.