Amnistía Internacional pide al Gobierno que no se estigmatice a los miembros de la PAH
Amnistía Internacional (AI) ha pedido al Gobierno que no admita "declaraciones estigmatizadoras por parte de autoridades del Estado y miembros del PP" contra los miembros de la Plataforma de Afectados por la Hipoteca (PAH). Esta organización ha enviado una carta a la vicepresidenta de Ejecutivo, Soraya Sáenz de Santamaría, con este fin y con la solicitud de que no se permitan medidas restrictivas contra el derecho a la manifestación pacífica.
Amnistía defiende en un comunicado que la protesta social, “sea en la forma que sea y siempre que se lleve a cabo de forma pacífica”, es un “derecho inalienable”. Recuerda al Gobierno que el derecho internacional “no permite, y muchos menos establece, la restricción a la libertad de expresión, simplemente porque otras personas lo encuentren ofensivo o porque las autoridades digan que constituye un riesgo para el orden público”.
En este sentido, añade que tanto la jurisprudencia internacional como el Tribunal Constitucional han reiterado que los responsables políticos “deben aceptar las críticas, aunque sean ingratas, molestas o incómodas”. Para Amnistía Internacional, "sería desproporcionado prohibir el derecho de manifestación, incluso aunque se realice cerca de los domicilios privados de los actores a los que quieren transmitir su mensaje, crítica o protesta”.
Amnistía quiere asimismo que el Ejecutivo tome acciones efectivas para que las medidas administrativas o sancionadoras (como multas) a participantes en escraches no repercutan en el derecho a participar en manifestaciones públicas.
La organización ha trasladado este mensaje a Sáenz de Santamaría porque "lamenta y considera graves las declaraciones que diversas autoridades y algunos miembros del Partido Popular están realizando contra las protestas pacíficas". Quieren que se reconozca "la legitimidad de sus reivindicaciones".
Precisamente, un grupo de personas respaldado por la PAH realizó un escrache a Sáenz de Santamaría el pasado 5 de abril. "Mi casa es otro terreno: el de mi vida personal y el de mi familia", dijo la vicepresidenta posteriormente en relación a esta acción. Sobre ella también se refirió el ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, que lamentó que Iván, el hijo de la también portavoz del Gobierno, tuviera que vivir esta situación.
AI ha remitido la misiva a la vicepresidenta después de algunas declaraciones de dirigentes del Partido Popular, como las de su secretaria general, María Dolores de Cospedal, que llegó a comparar estas acciones con el nazismo.
La organización "está preocupada por el intento de estigmatización a todo un colectivo con acusaciones genéricas de 'pertenecer a organizaciones filoetarras', 'utilizar prácticas nazis', e incluso que se pidan 'medidas contundentes por parte de las fuerzas de seguridad del Estado', con el propósito de deslegitimar unas reivindicaciones".