Juegos Londres 2012: El remero nigerino Issaka se convierte en el 'moussambani' de las Olimpiadas (VÍDEO, FOTOS)
Cada competición deportiva tiene sus héroes y sus antihéroes. El antihéroe más conocido de los últimos tiempos en los Juegos Olímpicos es el nadador guineano Eric Moussambani, que en Sydney 2000 tardó 1 minuto y 52,72 segundos en concluir la prueba de los 100 metros, más del doble del récord mundial: 46,91 segundos. Tardó incluso más que la plusmarca mundial de los 200 metros: 1 minuto y 42 segundos.
Moussambani no está solo. Londres 2012 ya tiene su particular 'moussambani', el remero nigerino Hamadou Djibo Issaka, quien ha finalizado a 1 minuto y 23 segundos del vencedor de su serie en la primera semifinal de remo disputada este martes.
Lo meritorio de Issaka es que comenzó a remar hace apenas tres meses, informa AFP. El domingo hizo su debut en los Juegos, donde participa gracias a una invitación de la Federación Internacional de Remo. Terminó los 2.000 metros a 1 minuto y 40 segundos del ganador de su serie. No le importó. "Estoy muy feliz de ser el primer representante de mi país en los Juegos en remo", ha asegurado Issaka, quien se queda con el aplauso del público británico. "Finalizar con un aplauso es un orgullo y me dio fuerzas para dar lo mejor de mi mismo por mi país".
LOS OTROS 'ANTIHÉROES'
En el año 2000, junto a Moussambani, compitió en Sydney la nadadora guineana Paula Barila Bolopa, quien tiene la peor marca de la historia de los Juegos en los 50 metros libres: 1 minuto y 3,97 segundos. El récord mundial está en 23,73 segundos. Barila también acudió invitada a Sydney, donde recibió una gran ovación al término de la prueba. "Es la primera vez que nado los 50 metros. Era más largo de lo que pensé. Estaba muy cansada", confesó entonces.
En 1996, durante los Juegos de Atlanta, el afgano Abdul Baser Wasiqi fue el último de la prueba de maratón. Tardó 4 horas, 24 minutos y 17 segundos. Más de dos horas alejado del récord mundial, en posesión del keniata Patrick Makau, que recorrió los 42.195 metros en 2 horas, 3 minutos y 38 segundos en septiembre de 2011.
Veinte años antes, en Montreal 76, el fondista haitiano Charles Olemus marcó el peor tiempo en la historia de los Juegos en los 10.000 metros lisos, al tardar más de 42 minutos en completar la prueba. El récord está en 26 minutos y 17 segundos.