Manda un WhatsApp a su jefe tras fracturarse un dedo y la respuesta de éste acaba en el Juzgado
Apenas 15 minutos después.
La Justicia no ha anulado el despido de un trabajador que fue expulsado apenas 15 minutos después de que mandara un WhatsApp a su jefe informándole de que se había lesionado en una mano y que, por tanto, no podría trabajar.
Según informa La Voz de Galicia, el empleado, que trabajaba como conductor, se rompió un dedo y tras ser atendido en el médico envió a su responsable una foto en la que se veía su mano vendada.
A los 15 minutos, y siempre según explica La Voz, su empresa le envió al teléfono un archivo PDF en el que se le notificaba el despido. ¿La razón? "Motivos organizativos y de producción". Poco después le mandaron un burofax comunicándole la misma decisión.
El trabajador, que llevaba solo cuatro meses trabajando y tenía un contrato eventual cuya fecha de vencimiento estaba prevista para cuatro días antes de cuando fue despedido, consiguió únicamente una indemnización de 530 euros. Así que recurrió al Tribunal Superior de Xustiza de Galicia (TSXG), que tampoco ha declarado nulo el despido.
De acuerdo con ese Tribunal, "no resulta acreditado que la empresa tuviese conocimiento de la situación de la lesión del trabajador demandante (...). No cabe apreciar una apariencia objetiva de incapacidad duradera a la que se debe asociar un elemento subjetivo en la actuación del empresario".