En Francia dicen esto sobre el despido de un trabajador de Mercadona por comerse una croqueta
Lo resumen en una frase.
El diario francés Le Parisien se ha hecho eco de una noticia que ha tenido eco en España en los últimos días: el TSJ de Castilla-La Mancha ha confirmado que es improcedente el despido de un trabajador de Mercadona por comerse una croqueta que se iba a tirar a la basura.
"El empleado, que trabajaba para la marca desde hacía 16 años, había comido un producto cocinado en el lugar durante el cierre, a pesar de que la normativa lo prohíbe", explica el diario francés, que empieza su artículo de una forma rotunda: "Su despido no está justificado por la justicia".
El rotativo explica que la dirección citó al trabajador dos días después de los hechos y le recriminó su acto, ya que la normativa prohíbe el consumo de productos sin previo pago por parte de los empleados. Y le despidió inmediatamente por "falta grave".
"El empleado emprendió entonces acciones legales contra la marca Mercadona", dice Le Parisien que completa que "en su sentencia, el tribunal estableció que, aunque la acción del empleado pudiera ser sancionada con una multa, no constituía una 'falta grave".
"Y 'en ningún caso', detalla la decisión judicial, la ingestión de una croqueta que iba a ser tirada a la basura puede generar "la sanción más grave en el mundo del trabajo, como el despido del trabajador", añade.
"Como resultado, se ordenó a la cadena de supermercados que readmitiese al empleado despedido injustamente o, en su defecto, que le indemnizara con 39.700 euros por salarios impagados. También tendrá que pagarle 600 euros en concepto de costas judiciales", añade el periódico.