La más grave de las lluvias está por llegar y la AEMET emite un comunicado de urgencia: caerán más de 100 litros
Ojo con Baleares y Cataluña.
El martes entró en España una vaguada desde el Atlántico que ha provocado un notable descenso de las temperaturas en gran parte del país, dejando un tiempo inestable en algunas zonas. Sin embargo, lo peor está todavía por llegar y la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) prevé que lo hará este miércoles.
"Aumenta la inestabilidad atmosférica por el paso de una vaguada y posterior formación de una DANA", ha advertido la AEMET. En este sentido, la agencia ha precisado que "habrá chubascos tormentosos intensos, acompañados de vientos fuertes y granizo, en el este peninsular y Baleares. ¡Precaución!".
Lluvias muy abundantes en Baleares
Ante esta situación, la AEMET ha lanzado un comunicado en el que informa de que este miércoles, debido al "progresivo aislamiento de la DANA en torno al área mediterránea", es posible que las precipitaciones y tormentas más fuertes se desplacen a gran parte del tercio oriental peninsular y Baleares, donde podrían caer más de 100 litros por metro cuadrado en menos de tres horas.
También señala que debe aumentar la precaución en el norte de Cataluña, donde estima que podrían caer más de 40 litros por metros cuadrados en una hora. De hecho, se espera que la inestabilidad comience a primera hora de la mañana y se extienda durante toda la jornada a gran parte del interior de Cataluña, E-SE peninsular, además de Baleares.
"En estas zonas, los chubascos y tormentas podrán ser muy fuertes, venir acompañados de granizo, que localmente puede ser grande, y de rachas de viento muy fuertes", advierte la agencia.
De cara al jueves, la AEMET prevé que la inestabilidad irá a menos en zonas del tercio E peninsular, aunque persistirá en Baleares, donde "acabará posicionada la DANA tras su proceso de aislamiento". Así, se estima que gran parte del archipiélago volverá a sufrir fuertes chubascos y tormentas, "alcanzándose acumulados que localmente pueden ser muy significativos".
Protección Civil pide extremar la precaución
La Dirección General de Protección Civil y Emergencias recomienda prudencia ante la posibilidad de inundaciones en las zonas afectadas por estas fuertes lluvias y tormentas previstas para los próximos días. Desde el organismo piden a los ciudadanos mantenerse informados consultando la página de la Red de Alerta Nacional y de la de Aemet ante el difícil pronóstico y evolución de los fenómenos tormentosos y posibles cambios que se puedan producir.
Asimismo, recomiendan extremar las precauciones. En concreto desaconsejan atravesar a pie o con el vehículo tramos que puedan quedar inundados si se dan las previsibles lluvias torrenciales. En caso de estar conduciendo cuando se produzcan las precipitaciones, piden reducir la velocidad y no parar en zonas donde discurra gran cantidad de agua, así como circular en lo posible por carreteras principales y autopistas.
Ante el riesgo de caída de rayos durante las tormentas, Protección Civil ruega colocarse cerca de edificios y en las viviendas evitar las corrientes de aire. En caso de que la tormenta sorprenda en el campo, hay que evitar correr y permanecer en los altos de las colinas, crestas o divisorias, y no refugiarse bajo los árboles. Asimismo, es importante alejarse de las alambradas y objetos metálicos.
Frente a los fuertes vientos, se deben asegurar puertas, ventanas y los objetos que puedan caer a la vía pública, así como alejarse de cornisas, árboles, muros o edificaciones en construcción y grúas que puedan desprenderse. Si se va conduciendo, hay que llevar especial cuidado en la salida de túneles, adelantamientos y cruce con vehículos pesados en carreteras de doble sentido.
Por último, en zonas marítimas, Protección Civil recomienda mantenerse alejado de la playa y lugares bajos que puedan verse afectados por mareas y oleajes. A su vez, pide evitar aparcar vehículos en zonas que puedan ser afectadas por el oleaje, ya que pueden ser arrastrados. Finalmente, insiste en pedir no poner en riesgo la vida para observar o fotografiar las espectaculares imágenes que puede ofrecer el fuerte oleaje.
