La AEMET detecta una anomalía histórica y alucina con las ‘bajaradas’: “Puede ser insólito en el mundo”
El extraño fenómeno meteorológico ha tenido lugar en Gran Canaria.
La Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) lleva lidiando durante las últimas semanas con varios negacionistas que en las redes sociales argumentan que las temperaturas extremas que cada vez son más habituales se han registrado desde siempre.
La cuenta oficial de la AEMET de la Comunidad Valenciana ha respondido a esos negacionistas con datos. El organismo se ha referido a ellos de la siguiente forma: “Se dice: "es verano, es normal que haga calor en verano"”. Tras ello, han subrayado que se está registrando una anomalía histórica en la región.
“Lo que dicen los datos. Anomalía de temperatura del mes de julio en el promedio de la Comunitat Valenciana: +1,9 grados. Todos los días por encima del promedio normal 1991-2020”, ha detallado el servicio oficial de la Agencia Estatal de Meteorología en la Comunidad Valenciana.
Impresionantes ‘bajaradas’ en Canarias: “Puede ser insólito”
Por otro lado, el físico y meteorólogo de la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET), Juan Jesús González Alemán, ha indicado en su cuenta de Twitter que en Gran Canaria se ha producido un fenómeno muy poco habitual.
A raíz del mismo, ha tenido lugar una subida de casi 10 grados, alcanzando los 41 grados, en plena madrugada: “Es una barbaridad”, ha resaltado. El meteorólogo ha señalado que el causante de ese gran ascenso térmico nocturno “apunta al fenómeno conocido como ‘bajaradas’”.
Sin embargo, lo más sorprendente para el miembro de la AEMET ha ocurrido en la noche del jueves al viernes en Tasarte (Gran Canaria). El físico ha enfatizado que la mencionada localidad canaria “ha sufrido toda la madrugada el fenómeno de las ‘bajaradas’, de tal forma que la temperatura ha estado sobre los 40 grados”. De hecho, ha destacado que “no sé hasta qué punto puede ser insólito en el mundo esto”.
El experto ha explicado que “las ‘bajaradas’, como se les conoce en Canarias, son los llamados ‘vientos de ladera’ y es muy probable que haya sucedido. Son vientos que, bajo ciertas condiciones atmosféricas, son obligados a descender ladera abajo de las montañas con el consecuente calentamiento adiabático”.
“Este fenómeno de calentamiento adiabático (por disminuir su volumen al encontrarse cada vez con mayores presiones al bajar), sucediendo en el contexto de una gran masa de aire cálido sahariana, es muy probable que esté detrás de esa subida hasta los ¡41 grados! sin radiación solar”, ha precisado Juan Jesús González Alemán.