Se mudan a España y el sueño se convierte en pesadilla con los años
No todo es como lo pintan.
Muchos son los jubilados británicos que eligen España como destino para poder descansar y disfrutar de su etapa sin trabajo. Lo mismo que hizo en el año 2002 la madre de Alex, Jean.
Ella trabaja como profesora en Brighton, pero su progenitora decidió cambiar de aires y mudarse al sur de España. "En aquel momento, mi madre nunca había estado en España, pero una amiga le dijo que le encantaría", ha señalado al medio británico Inews.
Tras más de 20 años soltera, su madre decidió viajar a España. "Estaba reestableciéndose, la sociedad inglesa no es fácil con las mujeres solteras a su edad", ha detallado su hija Alex.
Jean se marchó a Málaga y la mudanza fue muy bien. Disfrutaba del estilo de vida local y consiguió una rutina en la ciudad andaluza, pero la situación ha cambiado por completo en los últimos años.
Tras una visita de su madre a Reino Unido, Alex se dio cuenta de que se estaba volviendo olvidadiza. "Repetía las mismas preguntas una y otra vez. No pasaban 30 minutos y volvía a preguntar", ha revelado.
Las personas que rodean a Jean le comentaron que creen que a sus más de 70 años tiene demencia. Aunque hablan de una atención sanitaria "fantástica" en España, saben que es un diagnóstico difícil porque vive en el extranjero.
"Hay más expectativas de que la familia esté presente. Contamos con servicios sociales involucrados, pero es difícil tener claridad sobre lo que van a proporcionar", ha razonado al citado medio.
Alex viaja a España entre cuatro o cinco veces al año, cuando su trabajo le permite viajar. "Le encanta el lugar donde vive y no quiere volver, y la familiaridad es buena para mantenerla anclada, pero llegará un momento en que eso ya no será posible", ha añadido.
"Al principio todo era genial, porque podían permitirse vivir de la pensión estatal y pasarlo bien comiendo fuera y tomando el sol", ha explicado, antes de reconocer que ahora la situación se ha convertido en "una pesadilla".