La policía desmantela una cola del hambre por la queja de un vecino
Treinta familias vulnerables se han quedado sin la ración de comida semanal que reparte una asociación en Valencia.
La Policía Local de Valencia interrumpió esta miércoles el reparto de comida en una cola del hambre de la Asociación Amigos de la Calle en el barrio de Campanar. Según recoge el diario El Levante-El Mercantil Valenciano, la entidad denuncia que cerca de 30 familias en situación de vulnerabilidad se han quedado sin su ración de alimentos para una semana.
Los agentes de Policía explican que actuaron ante las quejas reiteradas de un vecino y que se detuvo el reparto de alimentos por la necesidad de "tener un permiso para repartir en este sitio". La mitad de las familias que suelen acudir a esta cola del hambre, unas 30, se quedaron sin recibir la comida para alimentarse durante la siguiente semana.
Según declaraciones de la portavoz de Amigos de la calle, Carmen Allendes, al citado diario valenciano es la primera vez que alguien se queja desde el año 2007 que la asociación lleva realizando este labor. Y explica que "no hacemos la comida ahí, solo llenamos bolsas con comida no perecedera y se las entregamos a las familias que vienen. Además citamos a la gente cada media hora para que no haya mucha cola y no se amontonen".
En la entidad nadie se explica a quién ha podido molestar este reparto de comida: "Entendemos que la pobreza no es bonita de ver, pero es la situación que hay, y ahora mismo es muy dura", explica Allendes. Cuenta que se cita a la gente un solo día a la semana entre las tres y las seis de la tarde en un parque en el que hay mucho espacio.
Tendrán que hablar con el Ayuntamiento para buscar soluciones porque no saben si podrán volver el próximo miércoles al habitual punto de reparto.