Piden examinar las cinco peores atracciones turísticas de Europa y España sorprende con su tesoro acuático
Este nuevo estudio ha consultado más de 95.000 reseñas turísticas.
Algunos de los monumentos más elogiados del mundo han dejado a sus visitantes decepcionados. En un nuevo estudio de Radical Storage, se han analizado más de 95.000 opiniones de turistas de más de 200 de los lugares más visitados. Los cinco primeros puestos están ocupados por atracciones europeas.
Según publica la versión portuguesa de Euronews, el primer monumento "decepcionante" está en Reino Unido. Se trata de la finca rural Alton Towers, un parque temático en la década de 1980, con 10 áreas temáticas. "Las investigaciones han revelado que casi la mitad de las reseñas del parque de atracciones, ubicado en Staffordshire, incluían comentarios que indicaban una experiencia negativa", reza la publicación. La mayoría de ellas se refería a la relación calidad-precio, a la "información engañosa" sobre las entradas y a los "altos" precios.
Por su parte, los visitantes de Budapest dicen sentirse decepcionados con sus balnearios. Los baños y piscinas medicinales de Széchenyi son los más grandes de Europa y ha sido destino turístico desde 1913. "Más de un tercio de las personas que dejaron una opinión sobre los spas reportaron una experiencia poco satisfactoria".
En España, visitar el Siam Park de Tenerife "no es una experiencia agradable" para muchos turistas. "Algunos usuarios mencionaron que se sintieron avergonzados debido a su peso e informaron que el parque no es apto para personas con discapacidad".
En cuanto al Time Out Market de Lisboa, "la situación ha empeorado desde que ganó el premio Hamburg Foodservice Award". Según las evaluaciones, "más de una cuarta parte de los revisores se sintieron decepcionados o desilusionados". La atracción tuvo el mayor porcentaje de reseñas que mencionaron multitudes o problemas de acceso.
Por último, los turistas creen que la Fontana di Trevi de Roma, está "demasiado llena". Cada año, los visitantes depositan alrededor de un millón de euros en la fuente, "lo que supuestamente garantiza su regreso a Roma en el futuro". Una de cada cuatro personas tuvo algo negativo que decir sobre su experiencia en este emblema italiano.
