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No solo EEUU: el aceite de oliva español se enfrenta a China y la batalla empieza 'amañada'

No solo EEUU: el aceite de oliva español se enfrenta a China y la batalla empieza 'amañada'

El mercado del gigante asiático es uno de los más complejos.

Aceite de oliva en un estanteGetty Images/Westend61

El regreso de Donald Trump a la Casa Blanca se ha traducido en una guerra comercial en forma de aranceles. Esas decisiones proteccionistas podrían obligar a muchas empresas españolas a abrirse a nuevos mercados.

Una de las alternativas más atractivas es la de China. Sin embargo, entrar en el mercado del gigante asiático no es una tarea fácil. Así lo ha destacado recientemente, en declaraciones a El Correo de Andalucía, Julio Ceballos, experto en estrategia de mercado que cuenta con 20 años de experiencia en el comercio en China.

Ceballos, que recientemente ha publicado su nuevo ensayo El calibrador de estrellas, ha asegurado que el de China es un mercado que "exige de prudencia, de planificación y de paciencia".

En ese sentido, cabe destacar que la batalla en el gigante asiático empieza un tanto 'amañada', ya que el mercado es muy especial. Según el experto, la competencia en China es "feroz" y se trata de un mercado "muy dinámico que prácticamente se convierte en uno nuevo cada tres o cinco años, y que exige tener una estrategia de largo plazo, ya que no se puede esperar obtener resultados en al menos cinco, seis o siete años".

Ni siquiera el aceite de oliva se salva. Julio Ceballos ha advertido a las empresas que quieran expandirse a China de que "tienen que saber que allí está absolutamente toda su competencia, con sus mejores equipos humanos, sus mejores técnicos y sus mejores productos, y a eso hay que añadirle que las marcas chinas con las que van a competir cada vez tienen mejores productos y un mejor servicio, y esto incluye al aceite de oliva, que hasta hace muy poquito este país, por ejemplo, no tenía, ahora ya tiene".

Y eso no es todo. El consumidor chino es mucho más analítico, lo que convierte al mercado del gigante asiático en más complejo que, por ejemplo, el estadounidense. "El consumidor chino está muy informado, ya que antes de tomar una decisión de compra, y hablo de una garrafa de aceite por ejemplo, hace todo un estudio de mercado particular, de cuáles son las diferentes alternativas, cuál es la diferencia de precio, qué es lo que ofrecen unas marcas y otras, en redes sociales, en internet... para ver cuál de esas marcas tiene una mejor reputación y mejores credenciales", ha detallado el experto en estrategia de mercado.