Marruecos fulmina a España con una de sus frutas preferidas

Las manzanas, conocidas por su textura crujiente y sabor agridulce, se han convertido en un alimento esencial no solo por su sabor, sino también por sus beneficios nutricionales. Rica en fibra, vitamina C y antioxidantes, y con un bajo contenido calórico, esta fruta ha visto un auge en su demanda a nivel global, especialmente en mercados emergentes y en desarrollo.

Según la empresa de investigación de mercado, Inteligencia Mordor, a nivel global, se proyecta que las ventas de manzanas frescas alcancen los 101.040 millones de dólares en 2024 y crezcan a 111.560 millones de dólares para 2029, con una tasa de crecimiento anual del 2% durante ese periodo. Esta tendencia está impulsada por los beneficios para la salud que ofrecen las manzanas y el desarrollo de nuevas variedades híbridas que satisfacen diversos gustos y preferencias.

Crecimiento del mercado marroquí

Marruecos ha emergido como un actor significativo en el mercado de las manzanas frescas, situándose como el exportador número 80 del mundo en 2022, según los datos recogidos por el Observatorio de Complejidad Económica (OEC). Ese año, Marruecos exportó a destinos como Mauritania, Malasia y Emiratos Árabes Unidos. 

Aunque la magnitud de sus exportaciones todavía no es muy significativa en comparación con gigantes como China, Italia y Estados Unidos, el país ha mostrado un notable crecimiento en mercados específicos. 

Además, ha incrementado sus importaciones de manzanas frescas, principalmente desde Alemania, Portugal y Bélgica, lo que indica una creciente demanda interna y una adaptación a variedades internacionales.

El impacto en España

En España las manzanas son una de las frutas que más se consumen, solo superadas por naranjas y plátanos. En 2022, España produjo más de 420.000 toneladas de manzanas, con Castilla y León liderando la producción nacional con 203.500 toneladas. Esta fruta es particularmente apreciada en regiones como Galicia, País Vasco y Asturias.

A diferencia de Marruecos, España en 2022 experimentó un decrecimiento de más de 69.000 toneladas en comparación con el año anterior. Concretamente obtuvo una producción de 421.600 toneladas de este tipo de fruta a nivel nacional, según Statista. Aunque España sigue siendo un productor importante, la calidad y variedad de las manzanas marroquíes están ganando terreno.