La ciudad subterránea más grande del mundo donde habitaron 20.000 personas y se encontró de casualidad
La facilidad de excavar en el suelo volcánico de la zona permitió a sus habitantes crear una ciudad de varios niveles.
La ciudad subterránea de Derinkuyu, ubicada en la región de Capadocia en Turquía, es un fascinante testimonio de la ingeniería y la vida antigua. Descubierta por casualidad en 1963, esta ciudad subterránea es la más grande del mundo, capaz de albergar a unas 20,000 personas.
Derinkuyu, cuyo nombre significa “pozo profundo”, se encuentra a 29 km al sur de Nevşehir. La ciudad, que se cree fue ocupada desde el siglo VII, tiene una historia que se remonta posiblemente a los hititas alrededor del año 1400 a.C. La facilidad de excavar en el suelo volcánico de la zona permitió a sus habitantes crear una ciudad de varios niveles subterráneos, utilizada como refugio durante las frecuentes invasiones en diversas épocas.
Las excavaciones arqueológicas han revelado entre 18 y 20 niveles subterráneos, aunque solo los ocho niveles superiores son accesibles para los visitantes. En su interior, se pueden observar establos, comedores, salas para el culto, cocinas, prensas para el vino, bodegas, cisternas de agua y áreas habitacionales. La ciudad cuenta con pozos de agua y galerías de comunicación, y se han detectado 52 pozos de ventilación. Estas instalaciones eran suficientes para dar refugio a una gran población, y el laberinto de corredores cuenta con puntos estratégicos cuyo acceso podía ser bloqueado para impedir la entrada de intrusos.
El militar e historiador griego Jenofonte menciona las ciudades subterráneas de Capadocia en su obra “Anábasis”, describiendo cómo los habitantes de Anatolia excavaban sus casas bajo tierra y vivían en alojamientos lo suficientemente grandes como para albergar a una familia, sus animales domésticos y los suministros de alimentos. Esta descripción coincide con lo que se ha encontrado en Derinkuyu, donde las excavaciones modernas han llegado a los cuarenta metros de profundidad.
La ciudad subterránea de Derinkuyu y su vecina Kaymaklı forman parte del Parque Nacional de Göreme y los sitios rupestres de Capadocia, que fueron elegidos por la Unesco como Patrimonio de la Humanidad en 19857. La conexión entre estas dos ciudades subterráneas se cree que se realizaba a través de un túnel de casi 8 km de largo.
Derinkuyu fue abierta a los visitantes en 1969, y hasta la fecha solo el diez por ciento de la ciudad subterránea es accesible para los turistas. En su interior, aún se pueden ver las cocinas ennegrecidas por el hollín de los hogares, lo que da una idea de cómo era la vida en esta ciudad subterránea. La ciudad también cuenta con áreas habitacionales y prensas para el vino, lo que indica que sus habitantes llevaban una vida relativamente normal a pesar de estar bajo tierra.
La ciudad de Derinkuyu es una de las 37 ciudades subterráneas abandonadas en la región de Capadocia, pero es la más conocida y la que atrae a más turistas. Su descubrimiento y la posterior apertura al público han permitido a los arqueólogos y antropólogos estudiar de cerca cómo vivían sus antiguos habitantes y cómo se organizaban para sobrevivir en un entorno subterráneo.