El incendio de Villanueva de Viver se reactiva en un punto crítico y obliga a nuevas evacuaciones

La pesadilla del incendio de Villanueva de Viver está lejos de su final. Después de las noticias esperanzadoras por el 'frenazo' en el avance de las llamas, la reactivación del foco en uno de los puntos críticos ha vuelto a disparar las alertas, con más de 4.000 hectáreas devastadas entre las fronteras de Castellón (la provincia más afectada) y Teruel.

Este lunes a primera hora de la tarde las autoridades han ordenado la evacuación de otros tres pequeños municipios castellonenses, Torralba del Pinar, Pavías e Higueras, además del confinamiento de un cuarto, Caudiel, de mayor extensión.

Estos desalojos, que podrían rondar los 100-150 habitantes según el último censo, se suman a los 1.500 vecinos trasladados en los municipios vecinos de Fuente de la Reina, Puebla de Arenoso, Montanejos, Montán, Arañuel y Villanueva de Viver, y las pedanías Los Calpes, Los Cantos, La Monzona, La Alquería de Montanejos y La Artejuela, donde por fortuna no hay viviendas afectadas.

La reactivación del fuego tras cuatro días de llama viva se ha producido en el barranco de la Maigmona, uno de los considerados "puntos críticos" por el puesto de mando avanzado. 

Este es el que más inquieta ahora, con unas condiciones meteorológicas muy adversas por los fuertes vientos, la baja humedad y una orografía muy agreste que han hecho que se haya vuelto a activar.

Según dicho puesto de mando, situado en Barracas, también inquieta otro punto en la zona norte, en la Fuente de los Baños, donde trabajan medios aéreos, fundamentalmente hidroaviones por su proximidad al embalse de Arenós, si bien aquí el fuego avanza lentamente y se está conteniendo de forma óptima, detalla EFE.

En otros puntos el fuego parece más controlado. Es el caso de Montán, donde los operarios trabajan en los alrededores, sin permitir que las llamas, que rodean el municipio, se adentren en el núcleo poblacional.