Nueva estafa especialmente peligrosa para los negocios, que podrían perder grandes cantidades de dinero sin apenas darse cuenta. Recientemente se ha denunciado un caso en Italia.

Tal y como ha informado el medio de comunicación italiano Primocanale, todo comenzó con una, en teoría, inocente llamada telefónica a una cafetería situada en la comuna italiana de Lavagna.

En la conversación con el establecimiento, un hombre se presentó asegurando ser el gerente de una compañía que se dedicaba a gestionar equipos de pago electrónico (conocidos popularmente en España por la abreviatura TPV).

Ese individuo, según apunta una primera reconstrucción de los hechos, presuntamente informó durante la llamada de una avería en el TPV, lo que llevó al propietario de la cafetería a realizar varias operaciones dictadas por el estafador para que volviera a estar operativo.

El resultado fue que el dueño del negocio hizo varias transferencias con destino al timador por un importe total de 7.000 euros. A raíz de la denuncia de la estafa por parte de la víctima, los carabinieri han localizado a dos hombres, uno de 56 años y otro de 37, que estarían implicados en el engaño.