Esta es la plaza de toros más antigua de toda España: data del siglo XIV y tiene una gran particularidad

La plaza de toros de Puebla de Sancho Pérez, situada en la provincia de Badajoz, es reconocida como la más antigua de España, con una historia que se remonta al siglo XIV. Esta plaza, con una capacidad para 2.000 espectadores, destaca no solo por su antigüedad, sino también por su diseño único y sus características arquitectónicas.

Una de las particularidades más notables de esta plaza es su planta rectangular, una rareza en comparación con las plazas de toros más modernas, que suelen tener una forma circular. Este diseño rectangular no solo le confiere un carácter distintivo, sino que también refleja las técnicas de construcción y las influencias arquitectónicas de la época en que fue construida.

Además, la plaza de toros de Puebla de Sancho Pérez carece de una capilla, un elemento común en muchas plazas de toros españolas. En su lugar, cuenta con un pequeño santuario adosado a la estructura principal. Este santuario, aunque modesto en tamaño, añade un toque de singularidad y ofrece un espacio para la reflexión y la devoción, manteniendo así una conexión espiritual con las tradiciones taurinas.

La historia de esta plaza está profundamente entrelazada con la historia de Puebla de Sancho Pérez y sus habitantes. A lo largo de los siglos, ha sido testigo de innumerables eventos taurinos y ha servido como un punto de encuentro para la comunidad local. La plaza no solo ha albergado corridas de toros, sino también otros eventos culturales y festivos, convirtiéndose en un símbolo de la identidad y el patrimonio de la localidad.

La conservación de la plaza de toros de Puebla de Sancho Pérez es un testimonio del valor que la comunidad otorga a su patrimonio histórico. A pesar de los desafíos que conlleva mantener una estructura tan antigua, los esfuerzos por preservar su integridad arquitectónica y su relevancia cultural han sido constantes. Estos esfuerzos no solo aseguran que la plaza siga siendo un lugar de interés histórico, sino que también permiten que las futuras generaciones puedan apreciar y aprender sobre la rica historia taurina de la región.

Es un monumento de gran importancia histórica y cultural. Su antigüedad, su diseño rectangular y la presencia de un santuario en lugar de una capilla la distinguen de otras plazas de toros en España. A través de los siglos, ha mantenido su relevancia como un centro de actividad comunitaria y un símbolo del patrimonio local, reflejando la rica tradición taurina de la región y la dedicación de sus habitantes a preservar su historia.