El semáforo espía que deja sin puntos a los autobuseros
Hay una ventena de sancionados.
Los conductores de los autobuses urbanos de Burgos no pueden más y las quejas han ido en aumento tras la instalación de una especie de semáforos espía que se han colocado en varias zonas de la ciudad para sancionar a aquellos que incumplen con las normas de circulación.
Algunos de los trabajadores han mostrado su malestar porque han sido multados pese a que consideran que estaban circulando de forma correcta.
Según recoge la DGT, los conductores son sancionados con 200 euros de multa, pero también pierden cuatro puntos del carnet y eso que aseguran que han cumplido con todas las normativas.
Tal y como explica el Diario de Burgos, hay una veintena de sancionados porque, aunque pasan con sus vehículos con el semáforo en verde, en cuanto se cierra su cámara actúa.
Su dimensión de 18 metros provoca que queda una parte sin pasar cuando el semáforo cambia de color y es algo que no pueden evitar los conductores.
Juan Jesús Nuño (CCOO) ha señalado al citado medio que "no podemos frenar en ese momento dado que los pasajeros se caerían y hemos tenido muchas multas".