Alerta por la estafa del 'hijo en apuros': pueden sacar hasta 6.000 euros a cada víctima
La Policía ha arrestado a diez personas acusadas de usar este fraude al alza en España.
La Policía Nacional ha detenido en Gerona y Lloret de Mar a diez personas, integrantes de una organización criminal dedicada a estafar por el método del "hijo en apuros" entre 2.500 y 3.000 euros a cada víctima, en una investigación iniciada en Valladolid. En un comunicado, la Policía Nacional ha detallado cómo funciona este sistema de fraude.
Las pesquisas arrancaron por la denuncia en octubre último de una mujer, que declaró haber sido víctima de una estafa de 5.840 euros al recibir en su teléfono móvil un mensaje de texto de un número desconocido, que manifestaba ser su hijo y que necesitaba urgentemente que hiciera dos pagos por él de 2.890 y 2.950 euros, con 90 minutos de diferencia entre uno y otro, ha detallado la Policía en una nota.
Los investigadores siguieron el rastro del dinero, que se distribuía a través de distintas cuentas bancarias y localizaron a los autores de la estafa, la mayoría de ellos en la localidad de Lloret de Mar, con el resultado de 10 detenidos, entre ellos el máximo responsable de la organización.
Así funciona la estafa del 'hijo en apuros'
Los estafadores realizan envíos masivos de mensajes a teléfonos móviles de posibles víctimas en los que se hacen pasar por el hijo del destinatario indicando que se le ha estropeado el teléfono y que le escribe desde otro número de teléfono.
Una vez la víctima contesta al supuesto hijo, éste último le solicita dinero utilizando diferentes excusas, pero coincidiendo todas las peticiones en la necesidad urgente de saldar una deuda de entre los 2.500 y 3.000 euros. El que la entrega del dinero deba hacerse de manera urgente a través de transferencia bancaria no da opción a los perjudicados a comprobar la veracidad de la petición.
Así puedes evitar caer en la estafa del 'hijo en apuros'
La Policía aconseja comprobar la veracidad de los mensajes, llamando al número que se tiene de su hijo o si este no responde al de alguna otra persona que pudiera estar con él.
Y si no es posible contactar con él, preguntarle al interlocutor algún dato que sólo puede saber su hijo o ponerle algún "cebo" para comprobar que es verdaderamente su familiar, como decirle si se toma todos los días las pastillas (cuando por ejemplo no toma ninguna medicación) o preguntarle cómo está su perro (cuando no tiene ninguno).