Urtasun traslada el apoyo del Ministerio de Cultura al cómico agredido por un neonazi

El ministro de Cultura, Ernest Urtasun, ha expresado esta mañana su apoyo a Jaime Caravaca, el humorista agredido por un conocido neonazi mientras actuaba en el pub Beer Station de Madrid. "Tolerancia cero frente a las actitudes violentas que atentan contra la integridad de nuestros artistas y la libertad de expresión", ha escrito en su cuenta en la red social X.

Urtasun ha confirmado, además, que ha podido hablar con Caravaca "para trasladarle el apoyo del Ministerio de Cultura frente a la agresión que sufrió a manos de la extrema derecha".

En un vídeo difundido por redes sociales por el propio Alberto 'Pugilato' y propagado por un sinfín de cuentas ultraderechistas se ve cómo el agresor entra en el espectáculo, pregunta a Caravaca si sabe quién es y sin esperar respuesta le propina un fuerte puñetazo dejándole arrinconado en el escenario, donde volverá a pegarle antes de irse. "Esto es por los comentarios pedófilos que ha hecho de mi hijo", dice.

El famoso neonazi subió una foto hace unos días con uno de sus hijos en redes sociales, a la que Caravaca contestó: "Nada ni nadie podrá evitar la posibilidad de que sea gay y de mayor se harte de mamar polla de negro obrero". Alberto 'Pugilato', tras el comentario, ya amenazó con lo que haría. También en su cuenta en X escribió: "Me sé de cierto cómico que va a ser el más gracioso de la unidad maxilofacial".

Pugilato es muy conocido en las redes policiales que investigan los movimientos neonazis y de extrema derecha. Sus letras están cargadas de mensajes supremacistas, racistas, homófobos y xenófobos. El agresor llegó incluso a considerar "camarada" a uno de los asesinos de medio centenar de personas en dos mezquitas en Nueva Zelanda. El seguidor neonazi llegó a ser condenado por un concierto en el que "unas doscientas personas acudieron con esvásticas, cruces gamadas, coreando a gritos Seig Heil y vendiendo lotería para apoyar a Josué Estébanez, ultraderechista condenado por asesinar al joven Carlos Palomino".

En sus redes sociales, hace unos días, se hizo eco de un vídeo en el que se ve cómo una persona quema una bandera LGTBI para sustituirla por una bandera con la esvástica y posteriormente realizar el saludo nazi.